martes, 9 de abril de 2013

QUE MUERAN, PERO LA TIRANÍA NO SE MUEVE NI SE CONMUEVE




Por Cosme Beccar Varela
Buenos Aires, 08 de Abril del año 2013 -1151
¿Qué hay de nuevo? Lo único nuevo es el último pedazo de la argentina que se cayó en estos días en La Plata. Lo malo es que el pedazo que se cayó ahora arrastró a más de 60 cadáveres y a miles de casas, con todas las pertenencias de miles de familias. 
Siendo esto grave y tristísimo, más triste si cabe, es la desvergüenza con que el gobierno y todo el mundo político se fagocitó la tragedia con un aire de "yo no fuí". La mujer que dice que es Presidente del país, hace diez años que tiene, por sí o por medio de su difunto "compañero", todos los resortes del poder y un presupuesto anual de $629.216.000.000 (unos u$s118.000.000.000) de libre uso (ya no existen las "partidas" presupuestarias y el Presidente puede aplicar esos recursos en lo que se le dé la gana, inclusive robarlos sin que nadie se dé cuenta). 
Sobraba plata para hacer lo que se debía hacer y no se hizo, por lo tanto, la primera culpable por no haber hecho las obras necesarias para el desagüe inofensivo de cualquier lluvia, es la Sra. Kirchner y, enseguida, sus ministros y el incalificable gobernador de la Provincia y sus ministros, más el Intendente de La Plata. 
Los políticos de la "oposición" no han pedido el juicio político de toda esta banda de peronistas, por evidente mal desempeño y posiblemente por los delitos de "abandono de personas" y estrago, para no mencionar la malversación de fondos públicos. No importa que no tengan mayoría en las Cámaras, pues esa la tienen otros peronistas que son cómplices de los respectivos Poderes Ejecutivos. Debieron haber reaccionado de inmediato para mostrar que les queda al menos un resto de decencia. No lo hicieron, porque no les queda ni eso y porque también son peronistas o filo peronistas, como los de Macri, o los izquierdistas, todos ellos afines a la ideología peronista. 
Imagínese Ud. que el gobierno hubiera estado en manos de alguien que no fuera peronista y que hubiera intentado gobernar al servicio del bien común. Ese gobierno tendría que haberse propuesto realizar todas las obras necesarias para proteger a los habitantes de toda clase de peligros previsibles (la lluvia, hoy por hoy, es tan previsible como el amanecer del día siguiente, debiendo agregarse, por precaución, una hipótesis de máxima que incluyan las grandes lluvias). Desde luego la oposición a ese gobierno, toda ella peronista, habría tratado de obstruir esas loables intenciones con todo el poder de que dispusiera, por ejemplo, el sindical.  Eso hubiera demorado las obras. 
Cae la lluvia, ocurre el desastre, todos los opositores, la prensa nacional e internacional, los sindicatos, los piqueteros, el clero en masa, los "moderados", en fin, toda la lista de esos mismos que ahora callan o protestan un poquito "pour la gallerie", atacarían ferozmente a ese gobierno y lo harían caer en tres días, porque, obviamente, la Fuerza Pública no le obedecería si le mandara reprimir esa sublevación general. 
Pero a la Sra. Kirchner no le pasa nada. Nada de nada. Sigue tan campante con su papel de "bonachona" que nadie le disputa. Cuando fue a Tolosa, uno de los barrios más afectados por la lluvia, una vecina reclamó (el diario no informa lo que dijo la vecina) y la usurpadora presidencial le contestó con un mohín: "¡La lluvia no es ni peronista ni radical, hermana, es sólo lluvia”("La Nación", 4/4/2013, pag. 19). La vecina podría haberle contestado: "Yo no soy su hermana y los desagües que no dieron abasto SÍ son peronistas porque Ud. es peronista y tendría que haberlos mandado hacer y no lo hizo". 
Lo que tiene de novedoso esta situación es que nos permite confirmar, cada vez con mayor fuerza probatoria, que el peronismo tiene un "certificado de impunidad" para destruir el país o dejar que se caiga a pedazos. Esa impunidad le es concedida por la "oposición" cuya complicidad ha quedado en evidencia en forma estridente y por la apatía de los "buenos patriotas" que siguen diciendo que "sin el peronismo el país es ingobernable" y por eso no quieren actuar para promover nuevos dirigentes que no tengan nada que ver con esta "dirigencia" corrupta e inepta. 
Si dejan que muera gente de esta manera y están dejando que mueran 1.800 secuestrados políticos en las mazmorras de la tiranía (esto hay que recordarlo siempre), es porque el país está preparado para aceptar que lo que queda de la argentina sea convertida en un Estado comunista, pasando por arriba de tantos cadáveres como sea necesario. 
Los primeros responsables de esta tragedia que se avecina son los políticos "opositores", los señores Obispos, el clero solidario con ellos, los señores de las "clases cultas", la prensa y en especial los "politicólogos" dedicados a desmenuzar cada “peleíta” entre peronistas o filo-peronistas silenciando el meollo de la cuestión, y los "buenos patriotas" que se están quedando bizcos a fuerza de mirar exclusivamente la punta de sus narices. Que conste. 
Cosme Beccar Varela