sábado, 18 de septiembre de 2010

AGUER: EL SIGNIFICADO DEL “CONGRESO DE DOCTRINA SOCIAL” PLATENSE

a Industrializacion

Con motivo de que se está realizando, en la Ciudad de La Plata, el 1º Congreso de Doctrina Social de la Iglesia (desde el jueves 16 hasta este sábado 18), Mons. Héctor Aguer, Arzobispo de La Plata dedicó su columna televisiva semanal en el programa “Claves para un Mundo Mejor” (América TV) al tema, destacando que “sus organizadores han pensado en un Congreso de autores, de modo que personas o instituciones puedan presentar sus trabajos, estudios que consisten en una consideración de la realidad social que les toca vivir, o de sus diversas experiencias, a la luz de la enseñanza social católica”.

“Es imprescindible que la juventud de hoy conozca la Doctrina Social de la Iglesia y que conozca aquellos criterios fundamentales apoyados en una visión del mundo que pueden ayudar a la gente de hoy a encaminar la convivencia social en términos de auténtica justicia y de verdadera paz”, sostuvo.

Valoró que el Congreso se dirigió “especialmente a los jóvenes”, con una importante “la participación de jóvenes en este Congreso” y reconoció que “si los jóvenes no se hacen cargo de esta enseñanza es muy difícil que, en los próximos años, la generación que va a acceder a puestos de relevancia en todos los órdenes de la vida nacional, pueda valerse de este tesoro de pensamiento y de orientaciones prácticas para ir suscitando mejores criterios y encaminando algunas soluciones a problemas que se han tornado crónicos en la sociedad argentina. Problemas que, por otra parte, son características del mundo contemporáneo”.

Comentó que había leído un “un reportaje que se hacía a estudiantes secundarios de la Ciudad de Buenos Aires, comprometidos en la toma de escuelas para exigir las mejoras de los edificios y otras reivindicaciones” que cuando se les preguntó quiénes eran sus referentes intelectuales “de los seis jóvenes cinco sostuvieron que sus referentes eran Marx, Lenin, Trotsky y el Che Guevara”. El prelado se preguntó: “¿Habrán leído a Marx, me pregunto yo? ¿Habrán conocido por estudios serios y referencias sólidas la historia del Siglo XX? ¿Tendrán idea de los estragos a que dio lugar esa orientación social, filosófica, política? ¿Tienen idea de las decenas de millones de muertes que ha causado?... Y estamos hablando de chicos que recién se asoman a la vida”.

Mons. Héctor Aguer consideró que “este Congreso en la Arquidiócesis de La Plata puede servir también como una preparación al que se va a realizar, en año que viene, a nivel nacional. El nuestro es un fruto del trabajo de la Pastoral Social que se viene haciendo a lo largo de año, pero debiera ser una dimensión permanente de la evangelización, porque no debe olvidarse que, en realidad, la Doctrina Social de la Iglesia es un aspecto, una parte, un capítulo, de la enseñanza total del cristianismo”.

También precisó que la Doctrina Social de la Iglesia “ha sido expuesta, en su formulación moderna, en documentos importantes de los Papas, comenzando por la encíclica “Rerum novarum” de León XIII; un último jalón hasta el presente lo tenemos en la “Caritas in veritate” de Benedicto XVI. En el Catecismo de la Iglesia Católica podemos hallar valiosos desarrollos de esa enseñanza, y en el “Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia” una exposición sistemática de la misma”

Adjuntamos el texto completo de la alocución televisiva de Mons. Héctor Aguer:

“Queridos amigos hoy estamos clausurando, en La Plata, el Primer Congreso de Doctrina Social de la Iglesia de la Arquidiócesis”.

“En la década pasada, el área de Pastoral Social de esta Arquidiócesis ha realizado tres Semanas Sociales, varios seminarios de estudio, la presentación pública del “Compendio de la Doctrina la Doctrina Social de la Iglesia” y una serie de actividades importantes para difundir, en la comunidad local, este cuerpo de enseñanzas que ilumina, de un modo magnífico, la realidad y puede ofrecer inspiración para ir resolviendo los graves problemas que afectan a la sociedad de hoy”.

“Este Congreso quiere ser un congreso estrictamente tal. Es decir, sus organizadores han pensado en un Congreso de autores, de modo que personas o instituciones puedan presentar sus trabajos, estudios que consisten en una consideración de la realidad social que les toca vivir, o de sus diversas experiencias, a la luz de la enseñanza social católica”.

“Han querido dirigirlo especialmente a los jóvenes, y por eso, gracias a Dios, ha sido importantísima la participación de jóvenes en este Congreso”.

“Es que en el fondo debemos reconocer que si los jóvenes no se hacen cargo de esta enseñanza es muy difícil que, en los próximos años, la generación que va a acceder a puestos de relevancia en todos los órdenes de la vida nacional, pueda valerse de este tesoro de pensamiento y de orientaciones prácticas para ir suscitando mejores criterios y encaminando algunas soluciones a problemas que se han tornado crónicos en la sociedad argentina. Problemas que, por otra parte, son características del mundo contemporáneo”.

“Hace poco he leído un reportaje que se hacía a estudiantes secundarios de la Ciudad de Buenos Aires, comprometidos en la toma de escuelas para exigir las mejoras de los edificios y otras reivindicaciones. Se les preguntaba quiénes eran sus referentes intelectuales, los líderes a los cuales ellos admiraban y en cuyo pensamiento se inspiraban. Me llamó la atención que de seis jóvenes cinco sostuvieron que sus referentes eran Marx, Lenin, Trotsky y el Che Guevara”.

“Eran muchachos y chicas entre 15 y 18 años. ¿Habrán leído a Marx, me pregunto yo? ¿Habrán conocido por estudios serios y referencias sólidas la historia del Siglo XX? ¿Tendrán idea de los estragos a que dio lugar esa orientación social, filosófica, política? ¿Tienen idea de las decenas de millones de muertes que ha causado?... Y estamos hablando de chicos que recién se asoman a la vida”.

“Por eso, es imprescindible que la juventud de hoy conozca la Doctrina Social de la Iglesia y que conozca aquellos criterios fundamentales apoyados en una visión del mundo que pueden ayudar a la gente de hoy a encaminar la convivencia social en términos de auténtica justicia y de verdadera paz”.

“Este Congreso en la Arquidiócesis de La Plata puede servir también como una preparación al que se va a realizar, en año que viene, a nivel nacional. El nuestro es un fruto del trabajo de la Pastoral Social que se viene haciendo a lo largo de año, pero debiera ser una dimensión permanente de la evangelización, porque no debe olvidarse que, en realidad, la Doctrina Social de la Iglesia es un aspecto, una parte, un capítulo, de la enseñanza total del cristianismo”.

“Esa Doctrina ha sido expuesta, en su formulación moderna, en documentos importantes de los Papas, comenzando por la encíclica “Rerum novarum” de León XIII; un último jalón hasta el presente lo tenemos en la “Caritas in veritate” de Benedicto XVI. En el Catecismo de la Iglesia Católica podemos hallar valiosos desarrollos de esa enseñanza, y en el “Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia” una exposición sistemática de la misma. Se resume en este libro lo que los pontífices han enseñado en los últimos cien años para esclarecer los problemas económicos, sociales, políticos y culturales del mundo contemporáneo a la luz de la razón y de la fe, siguiendo una constante tradición que tiene su fundamento en la Sagrada Escritura. Los invito a interesarse en conocer y difundir esta enseñanza”.

DIEZ RETOS PARA EL MOVIMIENTO PRO-VIDA.

a provida

Por el Padre Thomas J. Euteneuer

Presidente de HLI (Human Life International)

El martes 22 de enero del 2008, se cumplieron 35 años de la legalización del aborto a petición durante los nueve meses del embarazo en todo EEUU. Con motivo de la recordación de esta tragedia, ofrezco una lista de diez retos para el movimiento pro-vida en EEUU y en el mundo hispano. Si de verdad queremos que desaparezca la “cultura” del aborto, tenemos que madurar como movimiento. Las mismas ideas y estrategias que hemos empleado durante 35 años no nos han logrado la victoria que buscamos. Ello se debe a que la lucha contra el más difundido de los males espirituales que jamás haya penetrado en el mundo, sólo puede ser ganada según lo que Dios ha dispuesto. El movimiento pro-vida ha invertido más en el cambio político y cultural que en el cambio espiritual. No temamos luchar contra las armas de destrucción masiva de Goliat con la fe de David, que enfrentó al gigante “en el Nombre del Señor de los Ejércitos” (1 Samuel 17:45).

1- Pongámonos de rodillas y supliquemos al verdadero Salvador que le ponga fin al aborto. El movimiento pro-vida tiene que confesar con humildad que el aborto es un mal tan grande y tan profundamente arraigado en nuestra sociedad, que ningún poder humano por sí mismo podrá eliminarlo. Si bien es cierto que tenemos que votar por los políticos pro-vida, es más cierto aún que ellos no son los que nos van a salvar. El aborto tiene que ser expulsado por la autoridad espiritual que Cristo mismo le ha dado a la Iglesia, como en el caso de los espíritus impuros. Cuando el movimiento pro-vida comience a luchar con seriedad contra el aborto en su dimensión espiritual, entonces veremos auténticos triunfos pro-vida en la política y en la sociedad. No podemos decir que la oración no ha funcionado, cuando de verdad no se ha intentado.

2- Hagamos ayuno por la conversión de los que promueven el aborto. “Algunos demonios sólo pueden ser expulsados por medio de la oración y el ayuno”, dijo el Señor en Mateo 17:21. Los sacrificios tangibles y concretos que se ofrezcan de forma habitual por aquellos que han sido atrapados por el demonio del aborto, lograrán erosionar el poder de este mal. El Señor simplemente necesita un ejército de personas que están dispuestas a abrazar esta práctica. Entonces abundarán los resultados asombrosos. ¿Por qué no regresamos a la práctica del ayuno o de la abstinencia de carne los viernes, para ofrecerla por esta causa?

3- Recordémosles otra vez a las iglesias cristianas que el aborto existe con el permiso de ellas. La historia juzgará a las iglesias de Cristo que han sido apáticas ante el aborto, con más dureza que a las de Alemania durante las décadas de los 30 y 40 del siglo pasado –no porque el mal de esa época no fuese verdaderamente horroroso, lo fue, sino porque los cristianos de hoy no están siendo enviados a las cámaras de gas por denunciar abiertamente el aborto, de manera que no tenemos excusa. Se ha dicho que los lugares más calientes del infierno están reservados para los que, ante una crisis moral, no han hecho nada. Los cristianos deben saber que tendrán que dar cuenta de su silencio e indiferencia, ante la suerte de los más pequeños de los hermanos y las hermanas de Cristo.

4- Luchemos contra la investigación de células madres embrionarias y la eutanasia, con el mismo ardor que contra el aborto. No adoptemos la misma “lógica” de los abortistas, que se desentienden del niño no nacido y de la persona incapacitada, por la “inconveniencia” que representa para ellos, y a quienes consideran personas “no viables” y miran para otro lado, cuando se los destruye por razones de lucro, o peor aún, cuando se les mercadea como si fuesen material de exterminio. Reconozcamos que nuestra defensa de la vida debe permanecer sólida como una piedra a través de todo el ámbito de la vida humana, sin importar cuán pequeña o vulnerable sea.

5- Pongámonos a la ofensiva contra el financiamiento a la IPPF. Como muchos ya saben, la Federación Internacional de Planificación de la Familia (IPPF, por sus siglas en inglés), es la federación de organizaciones no gubernamentales (ONGs) más abortista del mundo [1]. El aborto no es la única fuente de dinero de la IPPF. Esta malévola organización también lucra abundantemente por medio de la venta de anticonceptivos (muchos de los cuales son abortivos) y de “servicios” de esterilización, así como del insensato financiamiento que reciben de los gobiernos, bajo el eufemístico pretexto de la “planificación familiar”. Los grupos pro-vida que no estén dispuestos a luchar para que retiren los fondos que financian los programas de anticonceptivos de la IPPF, simplemente continuarán presenciando el crecimiento de este monstruo y nunca serán eficaces en acabar con la demanda del aborto.

6- Boicoteemos a las empresas y organizaciones que financian o promueven el aborto. El negocio del aborto ansía lujuriosamente obtener el apoyo público de cualquier tipo. Las empresas y organizaciones que financian a los que matan bebés, necesitan que la conciencia pro-vida las sacuda contundentemente de su letargo. Las compañías que se nieguen a reconocer la dimensión moral del aborto, necesitan que se les haga sentir –en sus bolsillos—que el aborto es realmente una mala decisión empresarial. No escondamos la luz bajo la mesa: demos un testimonio público, escribamos cartas, llevemos a cabo manifestaciones, informemos a otros que disentimos de la “cultura” de la muerte.

7- Informemos a los médicos que los anticonceptivos abortivos constituyen un homicidio químico. La mayoría de los médicos pasan por alto la naturaleza abortiva de todos los anticonceptivos químicos. Esos médicos son cómplices de la muerte química de millones de bebés, y necesitan que se les diga que tendrán que dar cuenta ante el Trono de Dios por cada receta letal que tenga su firma. Si de verdad nos interesa su salvación, ¡informemos a nuestros médicos!

8- Desmintamos la idea, tan difundida y aceptada hoy en día, de que los preservativos y demás anticonceptivos reducen el número de abortos. Contradigamos esa falsedad con la verdad, a saber, que la difusión de la anticoncepción no reduce el número de abortos, al contrario, lo aumenta. ¿De qué otra manera se puede explicar por qué una sociedad, como la de EEUU, que está saturada de anticonceptivos, todavía practica 1,3  millones de abortos al año? Casi el 60% de las mujeres que recurren a los centros de abortos, dicen que la razón por la que están ahí para abortar, es porque les falló el anticonceptivo que utilizaron. Recordemos que las mismas personas que venden los “servicios” de abortos, son las mismas que venden anticonceptivos, y están logrando una enorme matanza.

9- Rechacemos a los políticos que creen que la violación, el incesto, la vida de la madre [2] y la malformación fetal, son causales para permitir el aborto. Los políticos o los candidatos a puestos políticos que creen en estas “excepciones” a la prohibición del aborto, en realidad están diciendo que “está bien” matar a algunos bebés y salvar a otros. Son peores que los fasos profetas; todos ellos son un fraude y perpetúan la idea de que podemos adoptar los anti-valores del diablo y, al mismo tiempo, servir a Dios. Votemos pro-vida y no pro-algunas-vidas.

[Nota del Traductor: El siguiente y último reto va dirigido a las personas pro-vida en EEUU.]

10- Reclutemos a los latinos y otras minorías, para que formen parte del movimiento pro-vida. Cuando marchemos en Washington DC, los mercaderes del aborto estarán planificando más formas de atrapar a las mujeres de las minorías, para que vengan a sus centros de matanza y así sacar provecho de su vulnerabilidad como inmigrantes, legales o ilegales. Todo grupo pro-vida tiene que inmediatamente colocar el interés por los latinos en su plan de acción, para que los valores católicos y culturales de estas personas no sean paganizados por la “cultura” de la muerte.

Que el Dios de la Vida les bendiga a todos.

Notas de VHI:

[1]. Para obtener más información acerca de la IPPF, visite, en el portal de VHI, http://www.vidahumana.org, el siguiente enlace: http://www.vidahumana.org/vidafam/ippf/ippf_index.html.

[2]. Para obtener una clarificación acerca de la diferencia entre el mal llamado “aborto” terapéutico y el aborto indirecto, que tiene que ver con el caso de peligro para la vida de la madre, visite, en el portal de VHI, el siguiente enlace: http://www.vidahumana.org/vidafam/aborto/peligro-madre_index.html.

CARMEN ARGIBAY QUIERE “SACAR LOS CRUCIFIJOS DE TRIBUNALES”

image

La anti-inquisición masónica contra el catolicismo continúa su avance en la Argentina. Esta vez, de la mano de la ministro de la Corte, haciendo gala de espíritu masónico, Carmen Argibay, quien plantea “sacar los Crucifijos de tribunales”.

En una nota publicada por el diario oficialista kirchnerista Página 12, se informó que Argibay afirma sus intenciones como genocida al decir que “es necesaria una ley de aborto” en nuestro país, junto a su explícita posición anticatólica, lo cual la inhabilita para emitir sus fallos para dictaminar cuando haya cuestiones en que esté involucrado el pensamiento de la Iglesia, ya que dejaría de ser parcial en ese caso por pública enemistad.

¿Qué es un Crucifico y qué tiene que ver con los Tribunales? El Crucifijo es una sanción jurídica dada a Jesucristo, verdadero Dios y verdadero hombre. Esa sanción penal fue realizada por la autoridad judía y por la autoridad romana de su tiempo, y constituyó una injusticia humana, a la vez que un acto de Caridad de Dios mismo. La Justicia de mano de Dios, la injusticia por mano del hombre, están en el Crucifijo, que recuerda la Vida, la Muerte y la Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo, Rey de Reyes y Juez de Jueces, quien vendrá a Juzgar a las Naciones en el Juicio Final… ¿Quién puede preguntar qué tiene que ver un Crucifijo en los Tribunales? Aun viéndolo de modo meramente humano, se concluye que hubo un procedimiento jurídico que condenó a la persona de Jesús con su sentencia: “Jesús Nazareno Rey de los Judíos”, que quedó grabada para la Historia. Molesta, por eso quiere sacarlo. Molesta porque es el llamado de la conciencia contra las injusticias que cometieron y que cometen los Jueces.

“Atea confesa, feminista, descontracturada, antítesis del arquetipo de los jueces argentinos, Argibay respondió durante dos horas preguntas de Mariana Carbajal, periodista de Página/12, y de Liliana Hendel, de Telefe”, afirma el pasquín oficialista. ¿Qué es una “antítesis del arquetipo”? Para quienes no lo saben, es un antimodelo, es un modelo que no debe imitarse bajo pena de depravarse. Su condición de “atea confesa”, de “atea militante” como ella misma lo dijo, la invalida para dictar sentencias en que la Iglesia tenga algo que ver.

Afirma en la entrevista la Juez: “la mayoría de la sociedad… cree que el aborto clandestino y sin asepsia es la causa de la muerte de muchas mujeres jóvenes, pobres e ignorantes”. ¿Esto es cuestión de “creencia”? La Dra. Argibay no cree en Dios, y su creencia es que el aborto mata. Claro: como tiene como mínimo una víctima segura, y como máximo dos: el bebé y la mamá. Por eso, el aborto debe ser penado. Que haya una mayoría que tiene una “creencia” de que “el aborto clandestino” mata… ¿la ley se debe basar en eso, aunque sea un disparate? Si hay mujeres ignorantes de cómo nacen los bebés que llegan a la Corte… ¿cómo no va a haber mujeres que apliquen en su vida la ignorancia que les transmiten, buscando asesinar a sus propios hijos o hijas?

Hablando del aborto, Argibay se dirigió en términos injustamente discriminatorios y ofensivos, al decir: “Y hay otra cosa: la “santa madre”. No quiero herir sentimientos, todo el mundo sabe que soy atea. La “santa madre” todavía tiene mucha fuerza”. La “Santa Madre” a la que se refiere la ministro de la Corte, es la Iglesia Católica, pero no es dicho en el sentido que un feligrés puede hacerlo, sino con tono burlesco, socarrón y pérfido, de lo cual un día deberá dar cuenta ante ese mismo al que quiere expulsar ahora de Tribunales, aunque haya sido condenado con una injusta sentencia hace dos mil años.

¿Qué es un “aborto razonable”? O en otros términos: ¿un “homicidio razonable” es bueno? Porque si Argibay lo habilita, podríamos tener varias CANDIDATAS al cadalso. Veamos qué dice la Ministro: “la sociedad ha tomado conciencia de lo que significa no tener una ley de aborto razonable y también de que es posible dictar leyes que signifiquen no una obligación sino un permiso, como con el matrimonio igualitario”. Entonces, podemos tener una ley que permita el “homicidio razonable”, y que no sea obligatorio: el que quiera, podrá hacer uso de esa facultad. ¿La Ministro y la Presidente de la Nación se animarían a avalar su propia eutanasia directa (es decir, sin aguardar un estado de agonía), porque está en juego la vida de numerosísimos niños por nacer por culpa de personas que aniquilan en un silencioso genocidio a quienes ni quejarse pueden aun?

Ante la pregunta de si es constitucional que el gobernador de Salta haya establecido la educación religiosa obligatoria en las escuelas públicas, respondió:  No, el Estado es laico. Quien quiera dar educación religiosa a sus hijos, de cualquier religión, puede mandarlo a una escuela confesional o enseñarle en su casa, pero la escuela pública no puede ser confesional. Hoy analizábamos ese tema con el presidente del Consejo de la Magistratura y con mi colega Elena Highton diciendo “tenemos que sacar los crucifijos de la sala de audiencias”. Esto no es más que una provocación y una explícita manifestación de la inhabilidad para el cargo de ambas Magistradas.

La Fe Católica y su educación en escuelas públicas, es propio de la identidad nacional, se encuentra en la Constitución Nacional, y es abarcado en la Ley Federal de Educación bajo el concepto de “educación integral”, es decir, para la trascendencia (en el sentido Católico del término)

Luego se le preguntó a Argibay: “¿No hay una ley que obliga a mantener un crucifijo o virgen instalada?”. A ello respondió: “No, ya sacamos una. Soy funcionaria de un Estado laico y recibo gente que puede tener todas las religiones o ninguna, eso es libertad de culto. Tener un símbolo religioso condiciona. En un tribunal oral los testigos juran por sus creencias, no le preguntamos cuáles, pero atrás hay un crucifijo que puede influir mal, el testigo puede considerarlo una discriminación. Además, no tiene sentido porque el Estado es laico”.

Queda la duda acerca de qué texto constitucional ha leído la Magistrada, en que se afirme que el Estado Argentino es “laico”, en el sentido de divorciado de la Fe católica. El artículo 2 de la Constitución es claro, así como la intención de los legisladores, basado en todos los antecedentes constitucionales referidos a la influencia de la Fe Católica en el Estado. Argibay accedió a un cargo pensando que vivimos en un país ateo, y se equivoca.

Los argumentos más fuertes que tiene para afirmar es aborto son: “La muerte: es la segunda causa de muerte de personas jóvenes. Usaría otro, pero no van a dar bolilla: las mujeres no tenemos derecho a decidir. El principal es tratar de evitar la muerte de jóvenes que por no haber tenido educación sexual enfrentan un problema que no pueden solucionar de otra manera. Los números son muy fuertes”. Esto no es más que una ridiculez, y muestra que lo que pretende es un genocidio de hijos de mujeres que son mantenidas sin acceso a educación y que son fáciles de engañar en una educación hedonista para luego ocasionar la muerte de sus propios hijos por ser una “molestia”. El modelo de mujer de la Ministro es una mujer pública, que toda adolescente lo sea, que se regalen a los varones para que las usen, y que luego maten a sus propios hijos. Nada hay que sea más inhumano: ese es el modelo “humano” de la Ministro.

Dios y la Patria, en quien Argibay no cree, se lo demandarán, porque hasta los ateos comparecerán ante el Juicio de Jesucristo al fin de los tiempos.

PROSTITUCIÓN, PORNOGRAFÍA INFANTIL Y TRATA DE PERSONAS

a antivida

Por el Dr.Francisco Bénard *

Tres temas por demás importantes trata en su libro el Dr. Marcelo Fainberg, abogado especializado en derecho penal y ex juez nacional en lo penal.Con la estatura moral que caracteriza al autor de esta obra "Prostitución,la pornografía infantil  y la trata de personas" se pone a tono con lo dispuesto en el Artículo 19 de la Constitución Nacional , por el cual se trata de garantizar el respeto a la dignidad humana, para lo cual la ley penal procura contener a quienes explotan a las personas más vulnerables, para someterlos a la explotación de sus agencias o a la complicidad de estas, con algunos explotadores en perjuicios de otros,  interfiriendo entre la eterna competencia entre empresas de servicios ilícitos en el llamado "crimen organizado".

Sexo y dinero. Autodegradación. Criaturas perversas. Mal necesario. Profanación del Amor. Proveeduría de placeres sexuales. Mercado de orgasmos. Escándalos.Vendedores de placer. Miseria humana.Esclavitud. Deleite. Diversión.Satisfacción. Erotismo. Entretenimiento. Repugnancia. Dolor. Satisfacción. Delito. Muchas palabras se pueden decir acerca del vocabulario prostitución, que hoy se ha convertido en un gran negocio para muchos y en un gran problema para otros. Hoy se ha convertido en una gran industria a través de nuevas formas de prostitución infantil, la pornografía infantil y el turismo sexual infantil.

Estas nuevas modalidades delictivas tienen una estrecha relación con el delito de trata de personas. La situación es por cierto de extrema gravedad social, si pensamos que hay más de un millón doscientos mil niños y adolescentes por año involucrados en la explotación sexual. Grave es aún el hecho que se calcula que hay treinta mil (30.000) pedófilos que comercializan pornografía infantil a través de Internet, sin perjuicio de otros medios masivos de comunicación, como ser radio y televisión, prensa, cybercafés, bares, películas y hasta dibujos animados son utilizados en la industria del sexo. La explotación sexual infantil es uno de los grandes flagelos del Siglo XXI, es una forma moderna de esclavitud. Es importante que los padres controlen el uso de Internet por parte de sus hijos menores de edad.

Esto y mucho más nos relata el distinguido abogado el  Dr. Marcelo Fainberg ,-el prólogo de su libro es del Dr. Eugenio Zaffaroni (Ministro de la Corte Suprema)- en su libro, cuya lectura no sólo es recomendable para los profesionales de la abogacía sino para toda la sociedad preocupada en estos temas tan afligentes y desgraciados. Nos introduce en temas desconocidos por muchos padres de allí que es recomendable para todos.

* Abogado-Periodista

pancho1947@gmail.com

¡¡¡¡SERAS LO QUE DEBES SER…!!!!

San Martin Jose de

Por Tcnl. José Javier de la Cuesta Ávila (LMGSM 1 / CMN 73)

 

“Argentina histórica y geográficamente federal y periférica deformada por las políticas ante el desafío de insertarse económica y culturalmente en el mundo”.

“Serás lo que debes ser o sino no sepas nada”. Cuánta sabiduría contiene el mensaje que el General Don José de San Martín nos legara a los argentinos, desde aquel lejano pasado, cuando se estaba forjando la Patria para ser una Nación. Es posible, que esa idea matriz, no haya sido escuchada a lo largo de los tiempos, y que el mandato sagrado para hacernos de la nada una sociedad plena de encantos, gracias y dones, olvidado. Esta duda cruel, asoma ante la realidad de lo que somos y lo que suponemos podríamos haber sido.. Porque, un país que todo lo tiene, es una nación en decadencia, que alarma al mundo, sorprende a las comunidades, desdice su pasado de éxitos y nos proyecta a un escenario futuro de negación y torpeza. ¿Es verdad que podemos ser o es una mentira que hemos alentado como una ilusión imposible de concretar? -

Es probable que los argentinos, particularmente los dirigentes y en especial los políticos en función de gobierno, con el afán de ser y hacer, hayamos olvidado que existen parámetros que provienen de la Naturaleza y que no se pueden modificar y que, lo inteligente, es encontrar la forma de adaptarlos para que resulten convenientes a los fines que se persiguen. La historia patria, muestra con claridad, que hemos vivido momentos de fulgor y tiempos de depresión, que han sido la resultante, respectivamente, de accionar concordante con las realidades o fuera de estas, originadas por búsqueda de situaciones diferentes a aquellas. Los últimos tiempos, al profundizarse la diferencia entre lo que se debe ser y lo que somos, este tema ha tomado carácter de grave y critico, impone su estudio y análisis, como la forma lógica y racional de encararlo, tras de una solución. Si, en algo tenemos que agradecer esta profunda situación actual de crisis, es que ella, al magnificarse, hace aflorar los problemas con absoluta evidencia, por lo que tenemos la imposibilidad de negarlos y motiva, honestamente, buscar adecuada y oportuna respuesta, ya que, debemos entender que, de no hacerlo, estamos colocando en alto riesgo nuestro futuro como nación.

En nuestros días, la situación crea una pavoroso panorama, en medio de un pantano maloliente, con crisis afiebradas y congojas crecientes, que lleva a una parálisis tenebrosa, que, acalla las voces, por temor o prudencia, mientras el larvado mal, destruye las entrañas y aflora pestilente, ante la mirada azorada y el gesto cómplice de aquellos que solo se sienten habitantes y, por lo tanto, no asumen la responsabilidad del ciudadano. ¿Que hubiera pasado si aquellos de mayo o julio del Siglo XIX, se hubieran desentendido de los cambios y no asumieran el rol que el momento les imponía? Las ventajas y los beneficios que hoy ofrece el país a los habitantes actuales, heredadas de un pasado de esfuerzos y trabajo, les llegan gratuitamente a algunos que nada aportaron para su evolución, ni volcaron sangre en las campañas y, menos aun, participaron en la formación de los cimientos de la Patria, que ladinamente, reniegan de aquel ayer. Ello, sin dudas, indica que se debe actuar, describir con la verdad el pasado y convocar a todos, aun a los temerosos y los ignorantes, para que unidos aportemos la forma de volver a Argentina a su magnifica capacidad y calidad que fuera su distinción en el pasado.

Seguramente al despertar, el habitante se convertirá en ciudadano, cuando el serlo signifique ser realmente parte y actor, no una mero espectador, aportando su individualidad para que surja como bien común, fruto del esfuerzo conjunto y resultante real del aporte de todos, el mañana que nos esta esperando. Es evidente que ese atractivo, que tiende a la amalgama y resulta lo convocante, no se alcanza hoy en la medida que se requiere y, lamentablemente, se desperdicia, trabando lograr lo que se `puede. Bajo esta tendencia, nuestra Argentina, se presenta como una sociedad desarticulada, hasta diríamos enferma, pues, aun teniendo calidad y capacidad, no activa su potencial y lo deja sumido a los efectos de un virus maligno destructivo. El escenario es de tanta gravedad que, de continuar profundizándose, puede poner en juego el futuro soberano de Argentina. La riqueza del país será nuestra en la medida que la activemos y la ofrezcamos como producción al mundo, sino, en el proceso de globalización en marcha, otros pueden ser los interesados que nos invadirán, dominaran y someterán a sus propios intereses. Este peligro, que puede materializarse por terceros, tiene una cara poco señalada, y es la de aquellos que olvidan su responsabilidad hacia el conjunto y que solo actúan bajo sus intereses o ideologías, socavando lo que significa la unión como comunidad. Es necesario saber y reconocer que hemos perdido el rumbo como nación en el momento en que dejamos de cumplir lo que habíamos acordado para concurrir a su formación y a lo largo de los tiempos deformamos lo que pactamos al inicio y nos dejamos llevar por “iluminados” que con promesas de bienestar han estructurado un poder equivoco que solo los ha beneficiado a ellos.

Ante la evolución, en esencia, los argentinos sentimos que hemos dejado de ser los reales propietarios del país y que su posesión ha sido sustraída por una clase de dirigentes políticos, cuya actuación produce la ruptura entre la sociedad y el estado. El estado, que tiene que tener una misión de servicio, ha convertido a sus instituciones en el voraz ejecutivo que vive a costas del esfuerzo común. En Argentina, como diría Juan Bautista Alberdi Araoz, se ignora que la riqueza económica, cultural, etc. de un país, se origina en su gente y no en los funcionarios. Sin embargo, al profundizar el análisis, se determina que el estado es solo un instrumento de los gobiernos que conforman los políticos que llegan al poder, por lo tanto, el origen de esta desviación debe ser encontrada en ellos, Esta conclusión lleva a recordar, cuando hace algún tiempo atrás, la comunidad reclamaba a los políticos “que se vayan todos” y observar que, después de un tiempo de silencio, han vuelto, directamente u ocultos por terceros con igual formación, concretando un engaño que cubre con sus actos fines de baja claridad. La realidad del “sistema” no concuerda con lo que se presenta del mismo, ya que, en sus actos y actividades, no se encuentran los parámetros concretos, sino los deformados, por resultados diferentes a los históricamente esperados.

“Serás lo que debes ser o sino no serás nada”, tiene hoy la misma vigencia en la que basaron sus acciones los prohombres de la Historia Patria y que se materializaban bajo las formas de los acuerdos y los compromisos. Debemos recordar que, las luchas fraticidas de la organización nacional, terminaron cuando se llego a la aceptación común de la ley expresada en la Constitución Nacional. Un país de rancio origen feudal por su historia y geografía, acepto la unión como nación, sin renunciar a sus soberanías como pueblos, y se asegura el futuro, determinando, claramente, cual seria su forma de gobierno (CNA Art 1). Los convencionales de aquel entonces, cautos y precavidos, imaginaron una forma de gobierno basada en la representación federal, actuando como republica, para que el poder se ejerciera de manera tal que sus efectos representaran a todos tras los objetivas de unidad y los valores de las autonomías. Repasar los pensamientos de Alberdi, que fueran la esencia de la redacción de nuestra Carta Magna, es una acción que permite determinar que, tantas décadas después, ellos tienen plena vigencia y que, su ejecución concreta en el presente, seria la formula deseable para encarar y solucionar nuestros problemas. Los políticos, bajo el argumento de la “unión nacional” y la búsqueda de la “gobernabilidad” avanzaron construyendo un “presidencialismo” abarcativo y centralizador, que asume derechos y se aparta de los deberes, que la historia, como formula de integración, señalo. Al crearse un “sistema de gobierno” que no coincide con la “forma de gobierno” hemos caído en una trampa que nos aprisiona, nos somete y nos impide la aspiración de “ser nación”. La “republica” se convierte en una “dictadura” que con la continuidad hace que los gobernantes resulten una suerte de “monarcas” que basan su poder en la impunidad a sus actos negativos y el temor en aquellos que no concuerdan.

Durante el Siglo XX, la aparición de ideas (ideologías) o intereses (corporaciones) desplazo los objetivos de satisfacer”necesidades o aspiraciones” individuales y de conjunto regionales (federalismo regional), que habían sido la raíz de las acciones, y comenzó un largo proceso que, bajo aparentes argumentos de aquella “unidad nacional”, desdijeron el pasado acordado, creando la falacia de un bienestar regalado. El gobierno se transformo, dejando de ser la guía o andarivel para las acciones, en el camino obligado que forzosamente la sociedad debe recorrer. Bajo el manto de la idea de la “democracia de masa” se desplazo a la “democracia del acuerdo” y se destruyo la nación pactada originalmente. La evidencia de la perdida de la “seguridad jurídica” señala que Argentina ha dejado de ser un “estado de derecho” y se esta destruyendo la democracia.

Cuando asoma el Siglo XXI, la Argentina que podía y debía ser, de acuerdo a sus calidades y capacidades (San Martín), es una organización vacilante, temerosa y en la que florece lo delictivo y la violencia, descripta así reiteradamente por pensadores, economistas, etc., que señalan los males, pero que no explican su origen y, por lo tanto, no ofrecen su salida. Pareciera ser que se ha instalado una cierta anomia en los pensamientos, que obnubila las ideas, y todo lo que se dice se transforma en un repicar de dolores sin solución. En nuestra Argentina del presente aparece un proceso de degradación que, para algunos, considerado irreversible, avanza ante la mudez y el silencio cómplice de los que sienten parálisis por miedo o, quizás, prudencia y, las pocas voces que se alzan quedan acalladas por la ignorancia.

El problema de desvarío interno (deformación del federalismo), a su vez, alcanza proyección en el exterior (situación periférica), lo que hace que Argentina aparezca como marginada del mundo, con conductas y acciones que no se ajustan a las tendencias universales y que, en algunos casos, hasta se contraponen con lo que se realiza en los países señeros exitosos. La realidad nos hace geográficamente un país periférico, en el hemisferio de las “aguas”, fuera de la orbita de concentración humana al Norte del Ecuador, conformando una real “isla” rodeada de océanos que nos separan y, al mismo tiempo, nos conectan internacionalmente. Esta “lejanía” obro en positivo, cuando la guerra asolo a Europa y, dejo saldos negativos, al no tener nuestros dirigentes la habilidad que requiere la “alta política”· en las mentes de los estadistas para adaptarnos a las realidades de la evolución. Este tema físico, en cambio, no se muestra igual en lo cultural, ya que Argentina es un país cuyos antecedentes y capacidades son exactamente iguales a los más avanzados occidentales y cristianos, ya que su población tiene origen en aquellos pueblos que lo conforman. Si en lo material estamos alejados, en lo intelectual y espiritual, integramos la mas importante calidad humana del planeta y esto es lo que nunca debemos olvidar, pues en ello esta la identidad que nos ha hecho sobrevivir ante los desastres y que tiene que alentarnos para salir de los problemas.

Cuando nuestros gobernantes entendieron que éramos “parte del mundo” y supieron “insertarnos” en el mismo, junto a aquellos que crecían con el progreso y el desarrollo, fuimos exitosos. En cambio, cuando se eligió el camino de la individualidad, alejándoos de los avances, creando una aparente forma de bienestar particular, que a los postres era falsa y equivoca, tropezamos en una constante de caídas de las que nos recuperamos por el potencial subyacente, pero que nos hizo perder el envión de la acción y disminuir nuestro valor relativo.

Argentina, un gran país, debido a la errada conducción de sus gobiernos, se ha convertido en una pésima nación, que hace que su sociedad viva una ficción, que el mundo observa alarmado por sus equivocas acciones, con el temor que sus desbordes afecten internacionalmente. Esla situación, es tan evidente, que se concreta en las diferencias abismales entre las realizaciones, aun en los países vecinos, que, con mayores problemas y menores calidades, logran resultados excelentes que, al ser comparados con lo nuestro, son la vara que determina cuan equivocados estamos. Es así que Brasil con sus extensiones marginales, Uruguay con su pequeño tamaño o Chile con sus tierras rocosas, avanzan progresando. Que decir de Australia o Canadá, que sus condiciones pueden ser comparadas con las de Argentina, que son reales oferta de desarrollo y evolución. Los políticos argentinos, en el rol de gobernantes, parecen estar ajenos a las tendencias y desarrollos exitosos de otras naciones, implementando formulas que ya se han mostrado como negativas o queriendo imponer algunas que no tienen consistencia aplicativa o son meras experimentaciones de dudosa efectividad. Este proceso, al que se a sumado una concentración centralizada del poder, desvirtúa todas las acciones y resta validez a los compromisos, lo que lleva a una constante de desdecir lo actuado y, consecuentemente, nuevos proyectos que anulan lo existente y, finalmente, hacen que se viva una negativa incertidumbre que traba, desgasta e impide lograr satisfacción por el esfuerzo realizado.

Para salir de este atolladero es necesario actuar con inteligencia y, al mismo tiempo, con calidad en las acciones, que permitan a la sociedad reconocer que con determinados actos se volverá a los éxitos que se alcanzaban en el ayer. El gran proceso, lógicamente, es político, pero su manifestación tiene necesariamente que mostrarse al mismo tiempo en lo económico, ya que no se puede avanzar con la ley si no existen las condiciones sociales que aseguren la paz y la convivencia.

Es evidente que, el paso para alcanzar políticamente el poder de gobernar, tiene que estar amalgamado con los desarrollos en la economía que permitan trasladarla desde su actual situación de dependencia a una adecuada libertad operativa. El país tiene aun reservas económicas que no han sido activadas y que surgen de algunos aspectos que jamás se imaginaron. El “cambio climático” como fenómeno natural, esta motivando el avance de las lluvias hacia el oeste, con lo que regiones desérticas adquieren la humedad, que las convierte en tierras de aptitud para su explotación, lo que amplia la “frontera agropecuaria” e incrementa los territorio con aptitud para su explotación. Además, de esta creciente posibilidad, los avances en las tecnologías permiten que la inexplotada “pampa de las aguas” (plataforma submarina) pueda ser aprovechada. Es decir, que nuestro país tiene y aumentara sus capacidades agropecuarias, por la incorporación de nuevas zonas y regiones que, si a su vez, se le agrega los potenciales que contienen los desarrollos tecnológicos, se puede razonablemente considerar que se volverá a ser el “granero del mundo” como lo fuera a principios del Siglo XX. En un mundo que cada vez necesita más alimentos, esta posibilidad es un desafío que no puede ser eludido y una ventaja que no debe ser olvidada...

Como los gobernantes de fines del Siglo XIX valoraron el Mundo para encontrar el lugar en el que se debía y podía insertar al país económicamente, para que la demanda externa sea el impulso para su progreso, es posible hacerlo en nuestros días, con la ventaja que existe mucha y mayor información global y particular para su valorización. Por una parte, esta el fenómeno del crecimiento poblacional y el de la urbanización, que significa un aumento de “meganopolis”, o sea traslado de habitantes hacia las ciudades y, consecuentemente, migración hacia ellas. Por otra, debe considerarse, el aumento de la demanda, que surge de la incorporación a mejor nivel de vida de sectores de la población marginados o postergados, que también constituyen incremento de la demanda,. Todo este proceso, bajo los efectos del “cambio climático”, que dará mejores condiciones a nuestro territorio por humedad y temperaturas que convertirán en aptas inmensas zonas y mejorara los rendimientos de las explotaciones. La realidad del mundo es un atractivo que tiene tal grado de fuerza que impone un camino a nuestro país que debe ser asumido por los gobernantes ya que, de no hacerlo, despertaran a terceros ante la necesidad y corremos el riesgo de ser por ellos sometidos..

Argentina, por su nivel socioeconómico, casi un símil trasplantado de Europa occidental, no vivirá el proceso que caracteriza en el presente al BRIC (Brasil, Rusia, India y China) en el cual el mayor porcentaje de su población padece de pobreza y que su aumento económico incrementa la brecha social, lo que le facilitara una evolución mas equilibrada de ajuste positivo. Nuestro país, pese a sus desventuras, es una amplia comunidad de “clase media”, en la que se puede avanzar por las oportunidades que la sociedad ofrece y la no existencia de marginalidades de ningún tipo por lo que el futuro de cada uno depende de la voluntad. Sorprende cuando los políticos predican o incitan a un enfrentamiento de clases, particularmente cuando ellos mismos son fruto de la amplitud de oportunidades que brinda nuestra sociedad, no llegando a entenderse cuales son esos objetivos disociadores o que grado de resentimiento tienen que los muestra tan fuera de la verdad solidaria que es característica de Argentina.

Un racional y lógico programa de acción exterior puede hacer que la oferta del potencial alimentario de Argentina, como lo fuera antes, sea el trampolín para el avance y el medio para negociar un efectivo intercambio de productos con alto valor tecnológico que, a su vez, impulsen las acciones propias atendiendo las necesidades y aspiraciones de la sociedad.. Argentina esta dotada de “ventajas relativas” (como es su capacidad feraz) que deben ser aprovechadas y su producción tiene que ser el medio del intercambio que le permita acceder a los mas altos beneficios de un mundo en permanente desarrollo evolutivo.

Sorprende la simplicidad de las acciones que requiere el país para volver a ser la nación destacada y convocante que teníamos hace una centuria atrás, y, consecuentemente, llama la atención que los dirigentes no lo conozcan o, quizás, lo ocultan para evitar que su materialización corrija las tendencias que les son a ellos favorables. Pero, con honestidad, la culpa no es exclusivamente de ellos, sino de los argentinos que son “habitantes del país” y dejan de ser “ciudadanos de la nación”, es decir, el pueblo tiene que hacer oír su voz e imponer sus condiciones, no para chocar con la tendencia, sino para que se despierte la voluntad de los que mandan para el bien y salud de la nación..

Sintetizando, Argentina tiene que lograr que el poder vuelva a la sociedad, como base de su sistema democrático, para que los gobernantes satisfagan las “necesidades y aspiraciones” de las comunidades y renegar de los dirigentes que la conducen con fines “ideológicos o intereses corporativos”, para ello se debe aplicar en plenitud la Constitución Nacional, en su versión original, cumpliendo el claro mandato referido a la “forma de gobierno” (CNA Art 1) que ella fija. El gobierno, real debe ser el representante federal de los territorios, operando como una republica equilibrada, que deberá apoyar las acciones de la sociedad para que se logre exportar el resultado de su esfuerzo y trabajo, particularmente de origen agropecuario, para posesionar al país en el consorcio de las naciones ofreciendo la producción en la que se tiene ventajas naturales especificas. De esta manera, Argentina ocupara nuevamente en el mundo el lugar y posición que su geografía, historia y poténciales le tiene particularmente asignada y se cumplirá el mensaje sabio de San Martín cuando nos dijo:

“Serás lo que debes ser o sino no serás nada”

CRISTINA FERNÁNDEZ WILHELM Y CHÁVEZ CELEBRAN LAS FIESTAS JUDÍAS

image

Se hace público en Twitter, en las cuentas que tienen Cristina Fernández Wilhelm y Hugo Chávez, su vinculación con la colectividad judía y sus festividades. Va quedando al descubierto la vinculación de ambos no al judaísmo en sí, sino al sionismo internacional. Chávez llama “hermana” a la presidente de Argentina

Cabe destacar que el sionismo es una secta judía que sólo pretende el poder del mundo entero, de donde seguramente surgirá el Anticristo como autoridad planetaria en algún momento. El sionismo gubernamental se percibe en la inclinación antinatural de los actos de gobierno, que atentan explícitamente contra los mismos principios de los Diez Mandamientos y la Moral que implican.

En efecto, Chávez escribió a la presidente argentina: “Hola Cristina, estoy compartiendo con miembros de la Comunidad Judía en Venezuela. Felicidades en el día de Yom Kippur. Querida hermana. He tenido una extraordinaria reunión con el Rabino y los Representantes de la Comunidad Judía en Venezuela. Terminamos abrazados y orando por la paz. Gracias Cristina por tu invalorable ayuda. Abrazos a la Argentina”.

La respuesta de Cristina Fernández Wilhelm de Kirchner fue la siguiente: “Hola Hugo, mil disculpas por la demora en contestar. Volví muy tarde de Rosario de un acto divino con Asociaciones Empresarias… Mi mejor saludo a la comunidad judía toda y a la venezolana en particular. Un gran abrazo para vos”.

¿Qué califica la presidente de Argentina como “acto divino”? Una reunión con asociaciones empresarias, es decir, la vinculación con la inversión de capitales, que traducido es el Becerro de Oro. Su vocabulario y sus actos los señala. ¿Estará circuncidado Hugo Chávez?

CRIPTOJUDÍOS: JUEGO DE NAIPES PARA OCULTAR LA IDENTIDAD JUDÍA

image

Por Art Benveniste

Adaptado de un articulo en Ha Lapid, Verano de 1999

En su presentación ante la Conferencia SCJS de 1999, en Los Ángeles, Seth Ward conto acerca de una mujer del norte de Nuevo México, a quien había entrevistado.

Ella estaba describiendo las practicas criptojudias de su familia y relato su juego de naipes, cada mes de septiembre, con su abuela. Jugar a los naipes era un ritual anual de la familia que estaba relacionado, de alguna manera, con las Altas Fiestas Judías.

Me recordó una historia contada por el rabino Baruj Garzón, de España: Hace varios años, la comunidad judía de España quería comprar un terreno en la zona de Barcelona, para un campamento de verano judío. El rabino Garzón condujo hasta allí desde Madrid, para negociar con el propietario. Fue a finales de septiembre. El precio fue convenido y el rabino le dijo al propietario que iba a volver a Madrid para hablar con la Junta de Directores y que podrían firmar los papeles a la semana siguiente.

De vuelta en Madrid esa noche, Garzón recibió una llamada del hombre de Barcelona. El propietario le dijo que había ciertos días de la semana siguiente en los cuales no podría firmar los papeles. El rabino tomo nota de las fechas y se fue a la cama. Al día siguiente estaba a punto de poner las fechas en su calendario, cuando se dio cuenta de que coincidían con las Altas Fiestas Judías. Llamo a Barcelona y pregunto por que el hombre no podía firmar en esas fechas. Se le dijo que la familia del hombre tenia un "extraño" calendario y que había algunos días de cada año cuando no trabajaban ni manejaban dinero. El rabino pregunto que hacia la familia en esos días. Se le dijo que jugaban a los naipes. Al controlar el extraño calendario del hombre para los años siguientes, encontró que los días siempre caían en las Altas Fiestas. El hombre no tenia ninguna explicación para el juego de naipes.

El Juego de Naipes Disfraza la Oración

El rabino explico que, durante la época de la Inquisición, los judíos secretos se reunían para orar sentándose alrededor de una mesa con naipes sobre la mesa y libros de oración sobre sus regazos. Cuando los extraños pasaban por ahí, jugaban a los naipes y cuando estaban solos, volvían a los libros de oración.

En abril pasado repetí esta historia en una charla que di en Tucson, Arizona. Mi presentación fue reseñada en el Tucson Jewish Chronicle.

Poco después el Chronicle recibió una carta de Emma Moya de La Herencia del Norte de Nueva México.

Decía:

En Nuevo México los naipes se llaman Barajas y en otras zonas del suroeste los naipes se llaman Cartas. Nuestra Academia Hebraica de Albuquerque ha investigado y registro la siguiente información, que puede o no relacionarse con la declaración del Sr. Benveniste en la crónica: La palabra "baraja" alude a la palabra "Braja", que significa "bendición" en hebreo.

Además, recientemente recibí un correo electrónico de Judith Crystal Pirkle, quien describió sus costumbres familiares.

Decía:

Todas las historias que me fueron transmitidas por mi madre y su familia, todas verificadas. También la costumbre de jugar a los naipes en la víspera del sábado, (Erev Shabat) fue transmitida a través de nuestra familia. Cuando los soldados mexicanos inspeccionaban las casas en la noche del viernes, para asegurarse de que nadie estuviera observando el Shabat, los criptojudios jugaban a los naipes y contaban historias de la Tora utilizando los naipes; se colocaba un grueso mantel sobre la mesa con una vela grande encendida; a la hora de acostarse, la vela se colocaba debajo la mesa, para que no fuera vista por las ventanas.

Desde entonces, he recibido varios otros ejemplos de criptojudios que usaban el juego de naipes como una estratagema para ocultar una conmemoración de los rituales judíos.

Fuente: http://yadbeyad.wordpress.com/