jueves, 26 de agosto de 2010

DIPUTADA PRESENTÓ UN PROYECTO PARA SUSPENDER EL CENSO 2010

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La diputada nacional, Sandra Rioboó (UCR-Buenos Aires) presentó un proyecto de ley por el propone suspender el CENSO 2010 “hasta que sea normalizado el funcionamiento del INDEC” y afirmó que “resulta imperioso que abordemos con celeridad la cuestión para evitar que el INDEC caricaturesco de (Guillermo) Moreno continúe con las tareas precensales hasta tanto sea normalizado por el Congreso Nacional”.

         La legisladora, cuya iniciativa cuenta con el apoyo de varios colegas de bancada y de otros bloques de la oposición, adelantó que “los motivos, que justifican nuestro accionar, básicamente se centran en la falta de credibilidad del organismo, el fracaso de las pruebas pilotos y en la nula participación de los cuadros técnicos del mismo en el diseño y la implementación del censo proyectado al 27 de octubre del corriente año”.

         “Aunque parezca drástica la propuesta – explicó Rioboó - es oportuna y necesaria. Moreno quiere hacer un CENSO privado que le arroje los resultados que necesita la pareja presidencial para mantener vigente la ficción estadística. Nosotros queremos normalizar el INDEC y hacer un CENSO que efectivamente sirva para actualizar los datos estadísticos del país”.

         Por último, Rioboó afirmó que “hay que parar a Moreno y revisar una decisión política que acarrea el desarrollo del operativo más grande que un país puede realizar en tiempos de paz hasta tanto podamos dotar de credibilidad al Censo Nacional”.

CARTA DEL DR. RICARDO SAINT JEAN A LOS JUECES QUE MANTIENEN CAUTIVO A SU PADRE

a Presos Politicos

"SE ACABÓ LA HORA DE LAS SÚPLICAS"

Excma. Cámara:

Nunca podría superar las razones jurídicas y morales expresadas por esta Cámara en los diferentes votos vertidos en el Plenario “Diaz Bessone”, cuyas consideraciones ya he citado en otros informes ante este mismo Tribunal.

Es su doctrina la que terminó de establecer que la prisión preventiva es una medida de carácter meramente procesal, ajena a todo concepto de punición, destinada exclusivamente a la realización, y la realización normal del juicio, esto es, la comparencia del procesado al mismo y que no se vean dificultadas la investigaciones por obra de éste. Medida cautelar que debe ser excepcional, restrictiva, interpretada pro homine; y fundada, debiendo en cada caso el Magistrado realizar la consideración específica de por qué motivo entiende que la persona objeto de la decisión habrá de fugarse o de entorpecer las investigaciones.

El caso es que el fallo que recurro no lo hace. Sus consideraciones son dogmáticas y nunca se ajustan al caso de Ibérico S Jean.

En efecto, cita el fallo “Genie Lacayo” de la Corte Interamericana, para analizar los tres requisitos relativos al “plazo razonable” de un encarcelamiento sin condena: a) la complejidad del caso b) la actividad del justiciable c) la conducta de las autoridades judiciales.

El fallo alude a la “complejidad de las investigaciones llevadas a cabo tantos años después de acontecidos los hechos”. Es decir que une dos causales: la complejidad, con el comportamiento de las autoridades judiciales de nuestro país.

Cualquier sabe que estos hechos fueron objeto de una amnistía dictada por el ex Presidente Bignone, luego derogada. Que se creó la Cámara Federal como Tribunal para juzgarlos. Que fueron seleccionados casos en los cuales se acusó y condenó a los Comandantes de las Juntas Militares y luego a los Generales Camps y Richeri por lo ocurrido en la Provincia de Buenos Aires, en causa en la cual jamás fue citado Ibérico Saint Jean.

Luego el Congreso dictó dos leyes reconocidas como leyes de amnistía por decenas de fallos de todas las jerarquías de la Justicia Federal de todo el país, incluída la Corte Suprema de Justicia de la Nación.

Para que arribara 20 años después este Gobierno y propugnara primero la derogación de esas leyes y luego, ya detraídas del sistema, dictara su improcedente nulidad.

Y para que mediante el desplazamiento de una supuesta “Mayoría Automática” en la Corte Suprema, instalara una nueva Mayoría Automática –específicamente para este tema- con el fin de arrasar con institutos fundamentales del derecho penal y constitucional argentino e internacional, a efectos de permitir la reapertura de estas causas.

La actividad entonces de las autoridades no ya judiciales, sino gubernamentales de la Argentina, no puede sino ser calificada de esquizofrénica, frente a ciudadanos que observan absortos cómo nacen, mueren y renacen estos procesos a lo largo de treinta y cinco años.

Entiendo que nada más hay que agregar acerca de cuál es, y ha sido, la actividad de unos y otros. Mientras que afirmamos que no puede haber complejidad que justifique una demora de treinta y cinco años en investigar, someter a proceso y condenar a una persona. Porque todos estos procesos tuvieron inicio mediante denuncias por privación ilegal de la libertad realizadas en los años 70 del siglo pasado. Semejante demora viola el debido proceso legal del art. 18 CN y la garantía del plazo razonable de juzgamiento o de determinación de los derechos de una persona, que la Nación se ha comprometido a respetar para todos sus habitantes mediante Tratados de jerarquía constitucional.

En cuanto a la posibilidad de fuga, ha dicho la jurisprudencia que deben sopesarse las condiciones personales del imputado. Ibérico Saint Jean es abogado y militar, habiendo alcanzado el grado de General. Está casado hace más de 60 años con la misma mujer. Tiene cinco hijos, catorce nietos y dos bisnietos. Hace 30 años que tiene el mismo domicilio, no tiene automóvil y vive de su jubilación que es poco más de cuatro mil pesos.

Cuando ocurrieron los hechos estaba retirado, y no fue convocado nuevamente al servicio de las armas, sino designado Gobernador no por parte de la Junta Militar, sino por quien fuera Presidente de la Nación, con facultades y competencias específicas para su tarea.

A partir de 1981 vivió en una ciudad en la Provincia de Bs As de más de 20.000 habitantes y cuando venía a Buenos Aires se desplazaba en colectivo. Jamás tuvo un incidente con nadie. Al contrario, he sido numerosas veces testigo que, cuando se lo reconocía, le brindaban muestras de respeto y reconocimiento a su persona o a su tarea de gobierno.

Tiene ochenta y siete años y, en cuanto a su salud, padece cáncer, por lo que se somete a un tratamiento oncológico mensual en el Hospital Militar Central, donde hace muy poco fue intervenido quirúrgicamente. Es cardíaco, tiene un marcapasos definitivo, y desde que se quebró la cadera, hace dos años, no tiene independencia para desplazarse, haciéndolo en silla de ruedas.

En caso de recuperar su libertad, es imposible Vs Excs. que pueda influir en los testigos como gustan decir los fallos de esta clase de causas para negar derechos elementales. Y es por el hecho, sencillo, de que en el caso de él NO EXISTE UN SOLO TESTIGO QUE LO IMPUTE DE NINGUNA CONDUCTA ILEGAL.

Ibérico Saint Jean está preso porque habiendo fallecido el Comandante del I Cuerpo de Ejército, y los dos Jefes de la Policía Provincial que en materia antiterrorista dependían del citado Cuerpo -tal como está probado en esta y en otras causas- después de treinta y cinco años, unos Jueces de La Plata se acordaron que fue durante cinco años Gobernador de la Provincia.

De modo que no me cabe duda, a la luz del fallo “Genie Lacayo”, de los precedentes “Hernández”, “Massera”, “Acosta” y del Plenario “Díaz Bessone”, de cuál es el criterio que en derecho corresponde adoptar en el presente incidente.

Pero no puedo detenerme en la situación de ilegalidad que sufre mi defendido, sin explayarme sobre sus causas.

Y lo voy a hacer refiriéndome a lo que ha ocurrido solamente en esta semana.

El 11 de agosto el Presidente de la Corte presentó públicamente un informe sobre la evolución de esta clase de procesos, destacando que su avance no es sólo el resultado de una decisión política, “sino del involucramiento de todos los poderes”.

“El avance de los juicios por derechos humanos –dijo- son el resultado del esfuerzo institucional de los tres poderes del Estado … Creamos una comisión inter-poderes y pudimos llevar adelante una política de Estado”.

Siguió Lorenzetti afirmando que : “Después de haber superado varias barreras legales …” (y vaya que lo hicieron ya que demolieron los principios básicos y las garantías del derecho penal y constitucional argentino e internacional) “… comenzó la fase de implementación de los juicios, a la que se plegó la gran mayoría de los jueces que no opusieron resistencia. Esto fue un proceso que comenzó con el juicio a las juntas militares y los por la verdad. Ahora no hay marcha atrás” afirmó.

Me llamó especialmente la atención la mención que hizo Lorenzetti de que la mayoría de los jueces no opusieron resistencia al plan político trazado, y en el cual participó la Corte. Evidentemente la resistencia de los jueces estaba prevista en los cálculos iniciales.

Asistimos entonces a un acto vergonzoso mediante el cual el Presidente de la Corte Suprema de Justicia confiesa la supresión parcial del funcionamiento republicano de la Nación. El Poder encargado de la custodia y defensa de las garantías individuales de los ciudadanos, se ha arrodillado ante los otros dos Poderes, e integrado una Comisión tripartita para juzgar a personas pertenecientes a un determinado sector de la sociedad, privado a partir de esa “política de Estado”, de las garantías legales y constitucionales que los asisten como ciudadanos.

En esta misma semana, el 15 de agosto, “La Nación” publica un reportaje a siete de los ocho jueces y Fiscales que juzgaron y condenaron a las Juntas Militares. Cuando el periodista les pregunta sobre los juicios actuales, Torlasco arranca diciendo textualmente: “un desastre, un disparate, están haciendo un juicio por diez víctimas, después van a hacer otro juicio igual, con los mismos procesados por otros diez ..,” ….”y con los mismos testigos” agrega Valerga Araoz

El ex Fiscal Strassera dice: “yo creo que se utilizan políticamente. Que este gobierno quiere prolongar estos juicios como forma de agitar la banderita de los Derechos Humanos …”

Sigue Torlasco: “estos hechos normalmente hubieran estado prescriptos conforme el art. 18 de la Constitución Nacional”. Se juzgan aplicándose retroactivamente la Convención sobre Imprescriptibilidad de Delitos de Lesa Humanidad…

“Y cómo lo ven?”, dispara el periodista:

Valerga Araoz: “yo no estoy de acuerdo”

Ledesma: “yo tampoco”

Torlasco: “yo tampoco”

Moreno Ocampo: …yo creo que la objeción de Guillermo (Ledesma) de que los crímenes de lesa humanidad, si no se utilizaron en el juicio (se refiere al Juicio a las Juntas) no se pueden utilizar ahora, es válida. “Hay un serio problema de prescripción”.

Ledesma: “yo diría que está legislado por el tribunal (Estatuto) de Roma por un lado, y por el otro adhiero al fin de un artículo de Andres D’Alessio (el único fallecido de todos ellos) sobre este tema, el principio de legalidad, donde cita a Radbruch. A pesar de haber sido perseguido por el nazismo, Radbruch decía que con el advenimiento de una sociedad democrática, había que aferrarse más que nunca a los principios y creo que el principio de legalidad no puede ser derogado por nada porque es uno de los logros más importantes de la civilización”.

De ocho Magistrados, seis (DAlessio, que falleció, lo dejó dicho por escrito) concuerdan en la absoluta ilegalidad de estos Juicios, y sólo dos los defienden. Casualmente los que dejaron de defender la Justicia para pasar a la política: Arslanian –con razones que dan para una u otra interpretación- y Gil Lavedra, que intenta explicar la prevalencia de un supuesto derecho consuetudinario que es inaceptable en todo el orbe como fuente del Derecho Penal. La Academia Nacional de Derecho, por unanimidad, se expidió también de esta manera condenado los fallos de la Corte que reabrieron las causas.

Estamos difundiendo este estado de ilegalidad en todo el país. Estamos concientizando a los militares, a los policías y a los agentes penitenciarios presos y a sus familias, haciéndoles ver que son víctimas de una discriminación y una privación de garantías y de justicia que no tiene precedentes.

Les estamos diciendo “QUE LOS ESTAN CORRIENDO CON LA VAINA”. Que las razones jurídicas con las que los persiguen no existen. Que no hay respaldo legal ni constitucional ni de los Tratados Internacionales para hacerlo, ya que unos y otros dicen exactamente lo contrario a lo que sostienen los tribunales federales que los están juzgando.

Y se nos acercan en todas las jurisdicciones empleados y funcionarios de los Tribunales, asqueados y en algunos casos temerosos ante las arbitrariedades que se cometen en los juicios y de las cuales no quieren ser partícipes. Los defensores oficiales están alarmados por la ajuricidad de los procesos. Los fiscales nos denuncian su desplazamiento por comisiones especiales enviadas por la Procuración que ejercen representaciones ilegales. Ellos y los parientes nos cuentan cómo llevan moribundos a las audiencias; ancianos sordos, con Alzhaimer, cómo aceptan como prueba válida testimonios interesados y absurdos; cómo envían y mantienen en prisión a ex suboficiales y oficiales de policías provinciales, federales, penitenciarios, del Ejercito, de la Marina, y ahora a civiles, treinta y cinco años después de los hechos y por imputaciones basadas en testimonios interesados e inaceptables, o simplemente porque figuran destinados en tal o cual Destacamento en aquellas épocas, conforme la información de los legajos manejados por Nilda Garré y sus colaboradores. Y nos enteramos también de las muertes que se producen.

Porque nosotros tenemos nuestros mártires. Esta misma semana, falleció el oficial Penitenciario Provincial Leonardo Nuñez. Tenía 57 años. Los delitos que le imputaban habían ocurrido cuando tenía 20. Había sido excarcelado por el Tribunal Oral de Bahía Blanca, pero el Juez Alvarez Canale, siguiendo la estrategia fijada por la “política de Estado”, lo dejó preso por otra causa. Murió encarcelado tras pasar 12 horas en una ambulancia, con dos úlceras sangrantes y una mancha en el hígado. Ya son 108 los muertos en prisión, y sin condena!

Cuando había 50 o 100 presos políticos, las arbitrariedades y las ilegalidades pasaban desapercibidas. Pero ahora son más de 900 los presos políticos. Y el escándalo es inocultable. Todas las novedades se transmiten diariamente por cadenas de mail –los organismos de inteligencia estiman que somos 385.000 personas- que estamos al tanto de los fallos que se dictan, de las vejaciones, de los homicidios.

Esto es un Tsunami señores Camaristas. Y cuando viene un Tsunami, lo último que hay que hacer es correr con la manada asustada hacia la costa, como hacen las alimañas o los ignorantes, que serán arrasados por una inmensa ola de indignación. Los marinos, los que saben distinguir las señales, los que conocen las reglas, saben que la única y mejor solución es levar anclas y navegar mar adentro. Porque sólo allí, aferrados a las profundidades, es donde se estará firme y seguro ante la tempestad.

Es por todos conocida la expresión del Káiser Federico II de Prusia cuando recibió el edicto judicial que impedía la orden de expropiación y derrumbe del molino -perteneciente a un campesino- que le afeaba la vista de su nuevo Palacio de invierno. Cuando todos esperaban un arranque de ira, el monarca exclamó, admirado: “Todavía hay jueces en Berlín”.

No me cabe duda de lo que debe resolverse en el caso de mi padre. Pero yo ya no suplico. Aunque sea ésta la función de un buen abogado defensor. Se acabó la hora de las súplicas.

El cese de la prórroga de la prisión preventiva le servirá de poco y nada. Porque al igual que hicieron con el Oficial Leonardo Nuñez, ya le abrieron otras causas en las que lo mantienen detenido.

Lo único que espero es un fallo que haga cumplir la ley. Un fallo que signifique una gota para cientos de miles de gargantas sedientas de Justicia, privadas de toda garantía y auxilio, que sólo pueden ser saciadas por sentencias que apliquen sin miedo las leyes que debieran regir para todos los argentinos.

Un fallo que nos muestre que no hemos abandonado la ciencia, que no ha muerto ni la civilización ni el Derecho, un fallo que nos haga exclamar a todos, como el monarca prusiano, que todavía hay jueces en Berlín.

LA PIEDRA FILOSOFAL

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Por Silvio H. Coppola

La piedra filosofal era un elemento, buscado con desesperación por los antiguos alquimistas, y también por muchos otros antes de ellos, que permitiría al que lo consiguiese, la transmutación de los metales o sea, convertir uno impuro en oro de la mejor calidad.

Además, esta piedra filosofal, al decir de algunos investigadores, lograría también la cura de las enfermedades, el movimiento continuo y tendría otras propiedades igualmente maravillosas. Por eso el interés que despertaba su hipotética posesión.

Actualmente se han desechado esas ideas, pero hay no obstante adquisición de otros elementos, que si bien no dan oro, dan poder y logran muchos propósitos políticos e incluso económicos, que de otra manera no podrían ser logrados.

Uno de ellos, es lo manifestado constantemente por este gobierno, que es titular de la frase y de sus consecuencias, que es la proliferación de que todo lo que no hace a sus propósitos o considera ilegítimo, es porque afecta derechos humanos.

Estos derechos humanos pueden ser de la más variada índole y se aplica por jueces a dedo, a unas personas si y a otros no, a unas instituciones si y a otras no, en igualdad de circunstancias. Los mismos hechos, pueden o no afectar derechos humanos, según sean las personas o entes afectados. La ley en absoluto pasa a ser pareja, sino antes bien, todo lo contrario.

Lo que es legítimo para unos, pasa a no serlo para otros, según vengan los vientos políticos. Y se aplican retroactivamente o no, según los mismos motivos. Esa es la piedra filosofal de la pareja presidencial y de su grupo, al que se adhieren sin chistar todos los jueces federales y su entorno.

Ahora esto de los derechos humanos, aparece increíblemente en el caso de Papel Prensa. Como es de conocimiento popular, existe una disputa entre el gobierno y el denominado Grupo Clarín, uno de los titulares de aquella empresa, que posee prácticamente el monopolio de la distribución de papel.

Como de ello quiere ser titular el gobierno o los K, como se prefiera, con bombos y platillos ha efectuado la presidente una denuncia ante la justicia (sic), para que se anule la transferencia a favor del Grupo, hecho hace más de treinta años por la familia del financista David Graiver.

Como esta situación está por demás prescripta e incluso los Graiver que tramitaron la operación han afirmado que en su momento, no han sido sujetos pasivos de ninguna intimidación por parte de funcionarios del partido militar en el poder, la presidente ha resuelto que sí, que fueron intimidados e incluso torturados y por lo tanto el hecho no ha prescripto porque afecta (¡¡oh sorpresa!!) derechos humanos. ¿Y de quién o quiénes? No importa, aunque haya un solo testigo de algo, aunque apliquemos retroactivamente la ley penal, aunque no observemos la cosa juzgada, no importa, se violaron los derechos humanos y basta.

Entonces pasa todo este enredo político y económico a la decisión del juez federal que interviene en La Plata, por delitos de lesa humanidad que se habrían cometido en esa jurisdicción durante el gobierno militar.

Por supuesto con decir por parte de la presidencia que están afectados derechos humanos, el juez Corazza ni se animará a chistar y mucho menos a decir que no es competente, porque la mágica frase le ha imposibilitado cualquier cuestionamiento. Pero claro, el caso se presta a una negociación y así seguramente va a terminar.

Porque el juicio de efectuarse es dudoso que termine este siglo y el poder público aprieta y mucho a la empresa. Por consiguiente no es improbable un acuerdo, de cualquier clase, pues las elecciones de 2011 están muy cerca y entonces la paz reinará en Varsovia.

La Plata, agosto 27 de 2010.

DENUNCIAN QUE EN LA UCA SE REALIZAN JORNADAS CON ORIENTACIÓN PRO-HOMOSEXUAL

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Nueva apostasía de la UCA

Fuente: Panorama Católico

Obispo: Mons. Jorge Bergoglio, SJ

Facultad de Derecho Canónico “Santo Toribio de Mogrovejo”

INSTITUTO DE DERECHO ECLESIÁSTICO (IDEC)

MIÉRCOLES 8 de SEPTIEMBRE DE 2010 | 15:00 a 19:30 HS.

15:00 Acreditaciones

15:30 Apertura e introducción general.

Pbro. Ariel D. Busso, Director IDEC

15:50 “Rasgos principales de la Ley 26.618”

Octavio Lo Prete, Secretario IDEC

16:20 “El matrimonio entre personas del mismo sexo desde la libertad religiosa y de conciencia

Juan G. Navarro Floria, UCA

PAUSA CAFÉ

17:40 “El matrimonio entre personas del mismo sexo: desafíos desde la educación”

Inés Franck, UCA

18:10 “El matrimonio entre personas del mismo sexo: perspectiva desde las confesiones religiosas”

Pr. Horacio Rizzo, Iglesia Adventista

Ricardo Docampo, Red de Familias Cristianas

María Ángela Cabrera, UCA

CIERRE DE LA JORNADA

Se ha previsto un tiempo prudencial luego de cada exposición para preguntas del público

Se otorgarán certificados a quienes lo soliciten al momento de la

inscripción

Auditorio “Santa Cecilia”

Subsuelo Edificio San Alberto Magno

AV. ALICIA MOREAU DE JUSTO 1500, BUENOS AIRES

Informes e Inscripción: idec@uca.edu.ar

Tel: (0054-11) 4349-0451 (lunes a jueves, 16-20 horas)

Arancel General: $ 20.- | Alumnos UCA: $10.-

Comentario : adherimos a los conceptos que comentaban el envío de la información:

El uso de la terminología del enemigo, "matrimonio entre personas del mismo sexo", en el ámbito de una Universidad Pontificia, significa conceder todo al enemigo. Y no puede ser ingenua esta terminología. Ni tampoco puede pensarse aquí en un desconocimiento del concepto de guerra semántica, (¿les suena Gramsci?) que resume la forma en que el enemigo de la Iglesia y de la civilización cristiana horada los conceptos introduciendo realidades aberrantes escondidas bajo apariencias de licitud. NO existe ningún matrimonio homosexual, es un fraude semántico, moral, intelectual, una burla a la decencia misma. Si así titulan, no hace falta imaginar demasiado lo que dirán. Tampoco existe una perspectiva lícita de un acto inmoral, ni en nombre de la libertad ni en nombre de la conciencia, ni en nombre de las "confesiones".

Esta jornada busca pintar con un barniz de licitud lo que es intrínsecamente malo. Y ocurre en la Pontificia Universidad Católica Argentina, cuyo Gran Canciller es el Arzobispo de Buenos Aires y Primado de la Argentina.

¡Santo Toribio de Mogrovejo, ruega por nosotros!

SOROS, EL MULTIMILLONARIO A LA CAZA DE CRISTIANOS EN LA CASA BLANCA

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En la foto: San Jorge Soros, decía la revista TIME hace unos años... tiene dinero para transformar muchas cosas, si quiere. George Soros financió un lobby que pide que los servicios secretos de EEUU informen de qué cristianos visitan al presidente norteamericano.

Fuente: ForumLibertas.com

Que los espías del gobierno hagan informes sobre los cristianos. ¿La Rusia de Stalin? ¿La China comunista? No, es Estados Unidos, y lo financia un gran capitalista: George Soros.

Este multimillonario es enemigo jurado de George Bush y en general del Partido Republicano. En 2004 invirtió docenas de millones de dólares de su bolsillo en intentar impedir la reelección de Bush. Para ello financia webs y grupos de presión de distinto tipo.

Una de sus iniciativas es el grupo CREW (del inglés "Ciudadanos por la Ética y la Responsabilidad en Washington"). CREW ha pedido que los servicios secretos norteamericanos divulguen o les permitan acceder a todos los registros "no importa su medio, formato o características físicas" relacionados con "con la visita de todos y cada uno de los siguientes individuos a la casa Blanca o a la residencia del Vicepresidente desde Enero de 2001 hasta hoy".

¿Y quienes son esos "individuos" cuyas idas y venidas se supone que deben estar grabadas y deben entregarse al lobby CREW? Se trata de los líderes de los grupos cristianos y pro-familia de EEUU. la lista incluye:

- Donald Wildmon, de la American Family Association
- James Dobson, de Focus on the Family
- Gary L. Bauer, de Our America Values
- Wendy Wright, presidenta de Concerned Women for America
- Louis P. Sheldon, y su hija Andrea Lafferty, de la Traditional Values Coalition
- Paul Weyrich, de la Free Congress Foundation
- Tony Perkins, del Family Research Council
- Jerry Falwell, de Jerry Fallwell Ministries

Es decir, un "quien es quien" del activismo pro-vida, pro-familia y cristiano en EEUU debería ser vigilado y las copias entregadas al lobby del multimillonario Soros.

"Pues que se las entreguen, estoy muerto de miedo, tiemblo de pies a cabeza, esta noche no podré dormir; es el fin del mundo", dice Donald Wildmon en tono burlón. "Si vas a pescar en un pozo y no hay peces en el pozo, no pescarás nada". O dicho de otra forma: los cristianos y activista pro-familia en EEUU no tienen nada que esconder.

Pero eso no implica que sea "normal" la petición del lobby del millonario Soros, que por cierto pide que el seguimiento y las copias las financien los contribuyentes, como si los servicios secretos norteamericanos no tuvieran otros asuntos que atender, por lo general más relacionados con otras religiones y la seguridad de los ciudadanos.

"CREW es una organización sin ánimo de lucro dedicada a proteger el derecho de los ciudadanos a ser informados de las actividades de los oficiales del gobierno, asegurando la honradez de esos oficiales", declara el lobby de Soros.

"Sólo es otro intento de unos abusones [bullies] de izquierdas por intimidar a los conservadores; son muy infelices cuando el patio de juego lo idrige alguien que no es de los suyos", dice Tom Minnery, portavoz de Focus on the Family.

Con las elecciones en recta final, es sobre todo una forma de dar "carnaza" a la prensa progresista para crear lo que en España se solía llamar "rumor de sotanas"... cosa que en EEUU no se puede expresar así porque las sotanas hace mucho que no juegan a la política de forma significativa. Sí hay, en cambio, todo un discurso -y una oleada de libros- que hablan en tono amenazante de la "teocracia cristiana" que "amenaza" con perpetuarse en el poder.

George Soros es un multimillonario de origen judío, que se ha declarado ateo, pro-aborto, pro-homosexualismo y pro-consumo libre de drogas. El grupo CREW, especializado en hostigar la presencia de cristianos en las funciones del gobierno cuenta con otros 80 ricos donantes, incluyendo al activista homosexual Tim Gill y el actor Rob Reiner, todos los cuales aportan suculentas cantidades al lobby.

PNC UNIR DENUNCIÓ UNA “GIMNASIA PRERREVOLUCIONARIA” Y ROBOS DE ARMAS

a Alberto_Asseff

El Partido Nacionalista Constitucional (PNC UNIR), denunció mediante un comunicado el robo de armas y una “gimnasia prerrevolucionaria”, según un informe de inteligencia recibido en la mesa de trabajo de dicha organización partidaria.

A continuación transcribimos textualmente el comunicado:

INFORME DE INTELIGENCIA ACERCA DE LOS REITERADOS ROBOS DE ARMAS EN LOS ULTIMOS MESES

La gimnasia prerrevolucionaria de algunos grupos vinculados al poder es seguida atentamente y con indisimulada preocupación.

La hipótesis que hoy se estudia como más probable es la posibilidad de que, ante un escenario de derrota electoral de los Kirchner, se intente crear un clima de violencia para posponer las elecciones, y crear diversas triquiñuelas para la confusión social.

Un informe de reciente elaboración, que habría sido analizado, reúne indicios inquietantes.

Por ejemplo, alude a las deliberaciones del Congreso del Movimiento Peronista Revolucionario (MPR) llevado a cabo el pasado 17/18 de Julio en Zárate. Allí se escucharon arengas como la siguiente: “a la primera orden del Compañero Néstor, vendremos bajando desde Jujuy por la 34, hasta Buenos Aires, pegándole a la puta oligarquía terrateniente y sus guardianes….”

El informe consigna una serie de hechos delictivos cometidos recientemente y que la justicia y la policía encuadran como delitos comunes. Pero, por el contrario, se trataría de operaciones de adiestramiento guerrillero-terrorista.

Por ejemplo, se menciona el ataque con bombas molotov y disparos de armas de fuego al Comando de la Sexta Brigada de Infantería de Montaña de Neuquén y la incursión y posterior intento de robar el Arsenal del Depósito del Batallón de Comunicaciones 121 de Mercedes, Corrientes. Estos casos, sucedidos en este año y presentados como hechos aislados, podrían sin embargo estar conectados.

Una lista que crece

Estos “hechos aislados” tienden a multiplicarse en los últimos tiempos. El informe señala los siguientes:

- Colocación de explosivos en uno de los Accesos a la Base Naval de Puerto Belgrano.

- Explosión una bomba en el Centro de Reclutamiento de la Policía Metropolitana (Emilio Mitre 900 Capital).

- Intento de robo de un camión de caudales (Empresa Brinks), en pleno centro, actuaron 16 personas, con armas largas y bombas molotov.

- Robo e intento de secuestro a un Empresario de la Construcción en San Isidro, actuaron 5 personas, con armas largas y cócteles molotov.

- Asesinato de un efectivo de Prefectura Naval (Of. 2º) en Avellaneda. No le robaron el auto.

Asesinatos de un Policía, por día, o día por medio.

- La Estadística Oficial da cuenta este año de 66 robos de armas a personal de las fuerzas armadas y policiales en distintos hechos delictivos con el modus operandi de robo y/o tentativa de robo de automotor con interceptación en la vía pública.

Haciendo el arsenal

El trabajo en cuestión contiene también precisiones sobre las armas robadas:

Gendarmería Nacional: 6 pistolas.

Prefectura Naval: 2 pistolas.

Policía Bonaerense: 49 pistolas.

Policía Federal Argentina: 9 pistolas.

El probable comienzo de una escalada

Otro capítulo del trabajo subraya que el promedio de Robos y Asaltos a Bancos es de 6 por mes y en alza.

También resalta la importancia del ataque y hostigamiento -con actuación de gente armada de la Organización “Tupac Amaru” de Milagros Sala- a Directivos del Hospital de Jujuy.

Otro caso: La Policía Federal, secuestró recientemente 1.200 Kg. de cocaína -que cruzaba el territorio nacional para traficarse hacia Europa-, por un valor de 34 millones de Euros, destinado al financiamiento de las FARC.

Es significativo en este cuadro el relevo de la cúpula de la comisaría de Bariloche, que intervino en el procedimiento que abatió al delincuente Bonefoi. La medida fue tomada por presión de funcionarios nacionales que viajaron a Río Negro.

Por otra parte, existe un promedio de 15 a 20 “secuestros express” por noche en la provincia de Buenos Aires, con el modus operandi de interceptación armada en la vía pública La víctima es rehén y se la lleva a recorrer cajeros o se lo conduce a su domicilio para robar la vivienda. Pero no siempre se roba en los cajeros, no siempre se roba el domicilio, no siempre se llevan el auto y después del hecho se abandona a la víctima. ¿Secuestros express o gimnasia revolucionaria?

El mes pasado hubo una reveladora presentación en sociedad. Empezó a actuar Tendencia Piquetera Revolucionaria (TPR), en cuya “bandera partidaria” ostenta el 4 de la Cuarta Internacional Trotskista.

(Informe recibido en nuestra mesa de trabajo).

SECRETARIA GENERAL

PNC UNIR

CONFERENCIA EN LA PLATA: LA POLÍTICA RELIGIOSA DE SAN MARTÍN Y BOLÍVAR, POR EL DR. ENRIQUE DÍAZ ARAUJO

Centro Manuel Belg

INVITACION A CONFERENCIA EN LA PLATA, ESTE VIERNES 27 DE

AGOSTO DE  2010

El Centro Manuel Belgrano invita a Usted a la conferencia titulada:

"SAN MARTIN Y BOLIVAR: SU POLITICA RELIGIOSA",

que estará a cargo del Prof. ENRIQUE DIAZ ARAUJO


     El encuentro tendrá lugar el próximo viernes 27 de Agosto, a partir de las 19:30 horas, en la sede del Centro Manuel Belgrano, ubicada en Calle 44, No. 828, entre 11 y 12 de la Ciudad de La Plata, Pcia. de Buenos Aires.

Esperamos contar con su presencia.   La Entrada es gratuita.

LAS FINANZAS MONTONERAS

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La verdadera historia de las finanzas de los Montoneros; la que el juez  Claudio Bonadío ha tratado de reescribir a contrapelo de la historia, montando un indigno show contra los Oficiales de la Armada que hace 25 años jugaron sus vidas derrotando al terrorismo.

Según este ex fiel servidor del menemismo, los delincuentes financistas que lavaban y regenteaban los cuantiosos dineros ilegales de Montoneros fueron unas pobres víctimas, buenos muchachos secuestrados para robarles sus bien habidas propiedades.

Un insulto a los argentinos con buena memoria, una deliberada operación judicial contra la Armada Argentina, malversando los mecanismos que la ley deposita en la responsabilidad de los jueces.

Notas publicadas hace dieciocho años en la ¨Nueva Provincia¨, de Bahía Blanca, los días 16,17,18 y 19 de marzo de 1993:

"LAS FINANZAS MONTONERAS"

Tras el rastro del dinero

El operativo había sido planeado para el 2 de enero de 1977, pero la lluvia hizo que fuera suspendido. El domingo 9, en cambio, amaneció con un sol espléndido y fue puesto en marcha. A primera hora de la tarde los autos partieron hacia Tigre.

El grupo de tareas sabía que Montoneros recomendaba a sus cuadros tratar de hacer actividades al aire libre durante los fines de semana, para compensar el stress de la vida clandestina. Pero el operativo de aquel día no tenía un objetivo puntual, era como arrojar la red en un lugar donde se suponía que habría algo para recoger.

Al promediar la tarde, los embarcaderos de las lanchas colectivas de la principal estación fluvial del delta, unos 30 kms. al norte de la Capital Federal fueron clausurados y todas las embarcaciones dirigidas hacia el único que quedó habilitado, el que utilizaban las lanchas provenientes de Carmelo, Uruguay.

Las embarcaciones colectivas esperaban turno y la gente descendía y pasaba frente a un control donde debían exhibir sus documentos de identidad. Los papeles eran controlados por un civil, apoyado por un grupo de aspecto militar, pero vestido de manera informal.

En realidad, el control era un montonero especializado en falsificar documentos, que habían sido "quebrado" en la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA) y convertido en colaborador. Después de mostrar sus documentos, la gente se dispersaba rumbo a la estación de ferrocarril o las paradas de ómnibus.

Del otro lado de la calle, a cierta distancia, estaban discretamente estacionados varios autos. Los ocupaban hombres del grupo de tareas y "marcadores", como eran denominados los montoneros quebrados que señalaban a otros miembros de la "orga".

En la euforia de 1971-74, cuando el "socialismo nacional" parecía una alternativa inmediata y Montoneros crecía aceleradamente, el auge había desbordado las técnicas de aislamiento y compartimentación propias de la clandestinidad. Mucha gente conocía a mucha gente y eso fue muy costoso para ellos.

Cuando los "interrogatorios compulsivos" - eufemismo por tortura - y los problemas internos de la organización comenzaron a doblegar a los militantes capturados, el sistema de recorrer los lugares de concentración de gente, como estaciones y algunas avenidas, arrojó resultados muy importantes, según reconocieron los protagonistas de ambos bandos.

En lo esencial el método no variaba: en un vehículo viajaba un "quebrado" con custodia y en otro u otros los "grupos de captura", que entraban en acción cuando el "marcador" creía reconocer a alguien.

Aquel domingo en Tigre, una pareja joven presentó pasaportes al control y pasó sin problemas. Habían recorrido unas decenas de metros, cuando el "marcador" dijo conocer al varón.

Los grupos de captura se arrojaron sobre la pareja, que fue sorprendida y no opuso resistencia. No llevaban armas, pero ambos tenían pastillas de cianuro, que eran una especie de certificado de pertenecer a Montoneros y son un capítulo especialmente dramático de esta historia. A esta altura es conveniente puntualizar una de las características de la lucha entre organizaciones como Montoneros y el ERP y el aparato defensivo-represivo del Estado.

Las técnicas de clandestinidad, que resumían décadas de experiencias internacionales, prescribían mecanismos cotidianos de contacto y control entre los integrantes de cada eslabón orgánico, que permitían detectar rápidamente la caída de un miembro del grupo y dar el aviso para que los restantes huyeran. La conducción de Montoneros pedía a sus integrantes que eran capturados, sólo 24 horas de silencio.

Los militares y policías sabían eso, por supuesto, y aplicando también la experiencia internacional, corrían contra el tiempo para obtener información rápidamente de los detenidos.

El método utilizado fue la tortura, o como se dijo "interrogatorio compulsivo" y resultó letal para las organizaciones guerrilleras, pues las "cadenas" de detenciones a partir de cada captura llevaron a la desarticulación de sus estructuras.

En sus relatos, los hombres de los grupos de tareas reconocieron la utilización de la picana eléctrica, pero subrayaron que fue importante la proporción de detenidos que colaboraron sin llegar a ser torturados y enfatizaron la importancia de la desmoralización de los guerrilleros a medida que se generalizaba el desplome de sus organizaciones.

En el otro bando, uno de los máximos dirigentes montoneros, reconoció que la conducción consideraba inevitable la tortura, como un riesgo asumido, de los militantes que eran capturados.

"Por razones políticas – explicó -, nosotros teníamos que condenar duramente la entrega de información bajo tortura, pero sabíamos que era casi imposible resistir. De todas maneras, hubo actitudes muy distintas entre los compañeros que fueron capturados".

La pista del oro

Los dos jóvenes atrapados en el embarcadero de Tigre fueron subidos a sendos autos que partieron a gran velocidad hacia la Escuela de Mecánica de la Armada, donde operaba el grupo de tareas que asestó los golpes más duros a Montoneros en el área metropolitana.

El varón habría reconocido rápidamente que trabajaba con sus compañeros en el "ámbito" - como se denominaba en la jerga a cada sector específico - de "finanzas internacionales".

El grupo de tareas no poseía hasta ese momento ninguna información sobre esa estructura. El operativo de aquel domingo 10 puso sobre el rastro de enormes sumas de dinero y de una sofisticada organización logística que tenía avanzadas las tratativas para concretar en Europa un muy importante compra de armas a traficantes alemanes.

Para Montoneros, el embarcadero de Tigre marcó el comienzo de una cadena de pérdidas muy importantes.

Al día siguiente, lunes 10, el montonero de baja graduación atrapado permitió trepar un importante escalón en las finanzas guerrilleras. Desde un auto "marcó" a Juan Gasparini (a) "Pata" o "Gabriel" cuando, portafolio en mano, entraba al edificio donde alquilaba oficinas, casi en la esquina de Santa Fe y Callao.

Gasparini es un personaje central y trágico de esta historia. Sobrevivió a la ESMA y denunció a sus hombres en el juicio que el presidente Raúl Alfonsín, ordenó contra los comandantes en jefe responsables del último gobierno militar. Ahora vive en Suiza, donde se gana la vida como periodista.

Había sido intermediario entre Montoneros y David Graiver, después de que éste recibiera a mediados de 1975, poco menos de 17 millones de dólares, provenientes del secuestro de los hermanos Born (60 millones) y de un directivo de Mercedes Benz Argentina (casi tres millones).

En 1990 escribió un libro titulado "El crimen de Graiver", con minuciosa información sobre las relaciones entre Montoneros y el empresario muerto al estrellarse su avión en México en agosto de 1976.

Gasparini entregó la dirección del departamento donde vivía con su esposa y sus dos hijos, en el barrio de Almagro, pero se negó a trasmitirle por el portero eléctrico una intimación a que se rindiera, pues el edificio había sido copado.

La mujer se resistió a balazos junto con otra militante que se hallaba en la casa y tuvo tiempo de quemar los papeles y documentos, Ambas mujeres fueron abatidas tras un prolongado tiroteo. En el baño del departamento, metidos en la bañera y cubiertos con colchones y mantas, fueron encontrados, llorando aterrados, los dos niños que fueron entregados a sus abuelos y viven ahora en Suiza, con Gasparini.

En rápida sucesión cayeron otras tres figuras principales del ámbito de finanzas y logística de la Organización. Pablo González de Langarica y Martín Grass pusieron al grupo de tareas sobre el rastro seguro de Fernando Vaca Narvaja y sus hombres viajaron a Suiza con el primero de ellos, apropiándose de una suma millonaria y montando un operativo cinematográfico que les permitió apoderase de un importante cargamento de armas más modernas y sofisticadas que las que poseían las fuerzas armadas y de seguridad.

La tercera captura importante se produjo el 15 de enero, cuando fueron atrapados Carlos Torres (a) "Ignacio" y dos asistentes. Torres era muy importante en el manejo de los fondos y había jugado un rol principal en la relación de Montoneros con Graiver, y después de su muerte, con su viuda Lidia Papaleo.

En la serie de operativos realizados en la Capital Federal, y el Gran Buenos Aires fueron atrapados varios miembros de la cadena de pagadores y fueron confiscados unos 400 mil dólares de los sueldos de enero de una parte importante de la organización.

A esta altura de los acontecimientos, hacía 110 meses que gobernaba la Junta Militar, la gran mayoría de los cuadros montoneros estaban "profesionalizados", es decir que se dedicaban sólo a su militancia y sus gastos eran pagados por la organización.

La pérdida del dinero provocó, en consecuencia, un amago de colapso, pues los miembros de las distintas estructuras no podía afrontar sus obligaciones cotidianas -alquileres, gastos de movilidad, alimentación, etc. - y corrían riesgos de ver desbaratadas las coberturas bajo las que se ocultaban.

La conducción de Montoneros utilizó mecanismos de emergencia que le permitieron sortear la crisis y en algunos de los militares que seguían el hilo del dinero montonero, quedó la sospecha muy fuerte de que la embajada cubana en Buenos Aires había prestado una ayuda esencial a la organización guerrillera.

Desde uno de los grupos de tarea se propuso detener en Ezeiza a un funcionario importante de esa representación diplomática y revisar su equipaje - valija diplomática - cuando regresaba de un rápido e inesperado viaje al exterior, pues se creía que podía traer los fondos para mantener el funcionamiento de Montoneros hasta que fuera reparado su sistema de finanzas. Pero el temor a un fiasco y el escándalo internacional previsible hizo que en los niveles con la autoridad decisiva, la propuesta fuera rechazada.

En las semanas siguientes, la Conducción Nacional - Carolina Natalia la llamaban en la jerga - de Montoneros comenzó a salir del país. Huyeron.

Una fuga milagrosa y armas en Europa

En la primera mitad de octubre de 1976 fue atrapada una militante montonera, en una acción a la que en un principio no se adjudicó trascendencia. A poco de iniciado el interrogatorio, la mujer pidió que le llevaran la cartera que tenía consigo cuando la capturaron. En el forro había una tira de papel cuidadosamente enrollada, con anotaciones en código: eran las "citas nacionales".

En el momento, los hombres del grupo de tareas no entendieron; después entraron en un frenesí operativo que culminó con uno de los grandes desastres sufridos por Montoneros en el primer año del gobierno militar .

Desde el punto de vista de la seguridad, el punto más frágil y peligroso de una organización clandestina eran los enlaces o contactos entre sus eslabones compartimentados, por lo que Montoneros trataba de reducirlos todo lo posible.

El mantenimiento de enlaces mínimos planteaba, como contrapartida, el riesgo de que personas o estructuras enteras quedaran aisladas si el enlace se rompía por la acción represiva o por accidente. Para cubrir esa eventualidad se establecían citas fijas, en días fijos, para los distintos grupos a los que se podía acudir en determinadas circunstancias, como cuando se rompía un contacto.

Esas citas, correspondientes a la organización en el orden nacional, era lo que contenía la tira de papel - semejante un largo ticket de cafetería- que estaba oculta en la cartera de la mujer:

El código era de una sencillez elegante y se basaba en la utilización de guías de uso común con planos y calles de la ciudad. En Buenos Aires y alrededores, por ejemplo, se utilizaba la guía Filcar. Debajo de la identificación cifrada de la ciudad, un número indicaba la página del plano a utilizar.

Después una letra y otro número identificaban - como es usual en esas guías- un cuadrante del plano. Finalmente, otra letra o número indicaba un vértice del cuadro elegido- superior derecho o izquierdo, inferior derecho o izquierdo -, que caía claramente sobre una esquina. Allí era la cita, cada miércoles, por la mañana temprano.

En algunos casos, cuando los miembros de la organización podían no conocerse, se añadía una contraseña o señal de identificación clara, pero no llamativa, como llevar un diario determinado, doblado de cierta manera, en tal mano.

En dos miércoles sucesivos y en alrededor de 10 días, fueron capturados entre 60 y 70 miembros de la organización. Sólo en la Capital Federal y el Gran Buenos Aires fueron atrapados 33 cuadros, casi todos oficiales, que era un grado bastante importante en Montoneros.

Al día siguiente de la primera redada y como consecuencia de ella, cayó Norma Arrostito, una de las figuras "históricas" de la guerrilla - aunque para esa época no integraba la cúpula - quien había estado en el grupo original que secuestró y asesinó al ex presidente, general Pedro Eugenio Aramburu en 1970.

La caída de las "citas nacionales" causó un severo trastorno de funcionamiento a Montoneros y se sumó a otros golpes exitosos de las fuerzas armadas y de seguridad, lanzadas a una represión masiva de las organizaciones guerrilleras, cada vez más aisladas políticamente.

La dirección montonera comenzó a analizar la conveniencia de que el jefe máximo, Mario Firmenich, saliera del país para "preservar la conducción". Al parecer el dirigente se negó al principio, pero finalmente acordó a marchar al exterior para buscar "solidaridad internacional".

Mientras se desarrollaba esa discusión, poco antes de finalizar 1976, Montoneros sufrió otra grave pérdida. A fines de noviembre o principios de diciembre, el jefe de la Regional Buenos Aires y virtual número tres de Montoneros, Carlos Hobert (a) "Pingulis" -quien en 1974 había seleccionado con Roberto Quieto a los integrantes del grupo que secuestró a los hermanos Born -, asistió a una reunión de Unidad Básica Revolucionaria (UBR), estructura de base que periódicamente "bajaba" algún miembro de la conducción.

A los pocos días, cuando salía de su casa - obviamente clandestina - "Pingulis" se encontró de lleno con un joven militante que había asistido a aquella reunión y pasaba casualmente por el lugar.

Las normas de seguridad prescribían que Hobert debía mudarse inmediatamente, por el riesgo que un joven subordinado fuera capturado - "en aquella época caían como moscas", recordó un dirigente montonero - y terminara entregando la dirección del jefe, como moneda de cambio por su vida o, por lo menos, para no ser sometido a tormento.

* Hobert no aplicó las reglas y prometió cambiarse de casa después de Navidad. Como medida de precaución, estableció un sistema semanal de control con el joven, para verificar que no había sido detenido. Entre un control y otro, el joven militante de la UBR fue atrapado y el 22 de diciembre el Ejército rodeó la casa de "Pingulis" con poderosos efectivos y la tomó por asalto, matándolo en el enfrentamiento.

Al mes siguiente - enero de 1977 - luego del operativo en el Tigre comenzó a caer la cadena de finanzas y logística, mientras "Carolina Natalia" (la Conducción Nacional de Montoneros) decidía abandonar el país, dejando por turno a sólo uno de sus integrantes.

Casi simultáneamente, Fernando Vaca Narvaja salvó su vida de una manera increíble, cuando uno de los cuadros que tenía contacto con él fue atrapado, siguiendo el hilo que el grupo de tareas de la ESMA había aferrado aquel domingo de ese enero, en el Tigre.

Quebrado rápidamente, el oficial guerrillero entregó su cita con el miembro de la conducción nacional, pero Vaca Narvaja no acudió a dos encuentros sucesivos que deberían haberse concretado en la zona del barrio de Colegiales.

La tercera alternativa, en la que ya nadie tenía mucha confianza, fue en Avellaneda, cerca del viaducto de Sarandí, a unos tres kilómetros del limite sur de la Capital Federal. El "marcador" aguardó en un auto con un acompañante, que se comunicaba por radio con los restantes miembros de equipo que participaba en la emboscada.

Vaca Narvaja llegó en un Renault 6, color verde, pero cuando estaba entrando en la encerrona algo lo alertó - podría haber sido un hombre que se asomó desde un techo con un arma larga - y aceleró, iniciando la huida.

Los miembros del grupo de tareas no estaban aún seguros de su identidad por lo que no abrieron fuego a tiempo. Sólo uno de los emboscados saltó a la calle y disparó con un revólver calibre 357 Mágnum contra el Renault 6 que ya doblaba en la esquina.

Era un buen tirador y Vaca Narvaja es un hombre con mucha suerte. Uno de los proyectiles rompió la luneta del auto, pegó aparentemente en una rueda de auxilio parada tras el asiento trasero y se desvió, hiriendo al jefe montonero en el músculo trapecio, entre el hombro y el cuello.

Herido, pero conservando su movilidad, siguió conduciendo y la fortuna volvió a protegerlo. El Falcon que había partido en su persecución chocó con un ómnibus. Algunos centenares de metros más adelante, arma en mano, el dirigente detuvo un Citroën marrón conducido por una mujer. La obligó a descender y logró desaparecer al volante del pequeño vehículo.

Dinero y armas

Otro capítulo verdaderamente cinematográfico derivado de la captura de la joven pareja en Tigre, que condujo a las caídas de Martín Grass y Pablo González Langarica, se desarrolló en Europa.

Oficiales de la Armada viajaron a Suiza con uno de los guerrilleros quebrados, que tenía acceso a cierta caja de seguridad de un banco en Ginebra y se apoderaron de un millón y medio de dólares.

También fueron presentados por el montonero a traficantes alemanes de armas y, haciéndose pasar por miembros de la organización, iniciaron una complicada negociación, que llevó largos meses y se desarrolló en París, Madrid y Hamburgo

Por fin, durante 1978 recibieron de los alemanes un impresionante cargamento que incluía mil pistolas ametralladoras Steyr austríacas y quinientos fusiles Heckler & Koch alemanes, armas de gran calidad de sofisticación que aún en los ejércitos y fuerzas de seguridad de los países más desarrollados sólo se proveen a los grupos de elite.

El lote se completaba con doscientas pistolas Browning, veinte pistolas Walther con silenciador, veinte pistolas ametralladoras UZI, también con silenciador y un buen número de fusiles pesados y granadas.

Montoneros había buscado asesoramiento sobre cómo introducir el cargamento al país y uno de los consultados - aparentemente sin enterarlo del contenido - había sido el célebre "Cacho" Otero, figura casi mítica, ya fallecido, a quien se adjudicaban muy sólidos conocimientos en materia de introducir mercaderías en el país sorteando controles. Cuando fue derrumbada la estructura de logística de la organización, Otero fue "desaparecido" durante un corto período pero recuperó la libertad sin grandes problemas.

De sus consultas, los montoneros llegaron a la conclusión de que la manera menos arriesgada de traer las armas era en avión, descendiendo en alguna pista clandestina. Para ello habían comprado y tenían aprestado en Miami un viejo pero confiable Super Constellation, cuyo destino final se perdió en la confusión de la derrota guerrillera.

Tras analizar y descartar varias alternativas, los hombres del grupo de tareas metieron las armas en un contenedor rotulado como "maquinaria industrial", lo cargaron en Hamburgo en un barco de ELMA y lo fletaron a Buenos Aires.

En el puerto de destino sólo fue advertido el jefe de la Prefectura Naval, pero se le pidió que guardara el secreto, para probar si el contenedor pasaba los controles regulares. Para mortificación de unos cuantos, diversión momentánea de otros y preocupación de todos, la "maquinaria industrial" entró sin problemas.

A esta altura de 1978 crecía aceleradamente la probabilidad de un enfrentamiento bélico con Chile y las armas fueron distribuidas en unidades navales, preferentemente en la Infantería de Marina y comandos anfibios, donde aún estarían inventariadas,

Los hombres del grupo de tareas también descubrieron que Montoneros había comprado sesenta morteros - mucho más que la dotación de cualquier regimiento argentino - y que se hallaban en un puerto del norte de Arica, desde donde tratarían de enviarlos a Buenos Aires.

En este caso no lograron apoderarse del cargamento, pero "pudrieron" la operación de manera tal que la organización guerrillera perdió los morteros.

Cómo la plata llegó a Graiver

En una de sus últimas gestiones oficiosas como ministro del Interior, José Luis Manzano pidió el primero de diciembre de 1992 -lo renunciaron al día siguiente - a la Policía federal que atendiera la situación de Juan Gasparini , quien tenía dificultades para renovar su pasaporte.

En la jefatura de policía le mostraron al ex montonero que el último documento que figuraba en su legajo era una orden de detención. Gasparini exhibió, entonces, el Boletín Oficial en que fue publicado el decreto del presidente Menem que lo indulta. Los policías reconocieron que tenía razón, agregaron el Boletín Oficial al legajo y le revalidaron el pasaporte en unas horas. Pocos días después volvió a Suiza.

Gasparini es, sin duda, una de las personas que mayor conocimiento de las finanzas montoneras. Era un oficial importante en ese ámbito de la organización y fue enlace con Graiver -en cuyas oficinas de Nueva York tenía un escritorio- y con su viuda Lidia Papaleo.

Además, es un sobreviviente de la ESMA, donde permaneció desde el 10 de enero del '77 hasta muy avanzado el '78, cuando viajó a Bolivia por cuenta y cargo del grupo de tareas.

Tres prisioneros fueron enviados a La Paz - ante un pedido de colaboración de otro organismo del gobierno militar argentino -, para montar una agencia de publicidad que hizo campaña electoral por el candidato del oficialismo militar boliviano, Coronel Pereda Asbún.

Después, liberado, Gasparini viajó primero a Panamá y, luego, a Suiza, donde reside y trabaja como periodista. Su experiencia personal le ha permitido conocer, por lo tanto, una parte importante de los hechos, pero no la totalidad, debido a la fragmentación de las historias por el carácter clandestino que tenía la subversión y la represión, pero de lo que sabe cuenta sólo una parte en su libro, muy reveladora, de todas maneras.

Obviamente, los tres sobrevivientes de la conducción de Montoneros - Mario Firmenich, Roberto Cirilo Perdía y Femando Vaca Narvaja - conocen mejor que nadie el manejo de las enormes sumas de dinero de que dispuso la organización y lo que queda -que no debe ser poco, puesto que hasta movió el interés político del presidente Menem-, pero se han refugiado en el beneficio del silencio.

A principios de 1974, Montoneros era la guerrilla más poderosa del continente y a esa altura financiaba sus gigantescos gastos en personal e infraestructura -sueldos, casa, locales, imprentas, fábricas de armas y explosivos, etcétera-, básicamente, mediante secuestros extorsivos.

En enero de aquel año, Roberto Quieto -número dos de Montoneros, detrás de Firmenich y delante de Perdía-, comenzó a planificar con el "Pingulis" Hobert, quien después se desvinculó de la operación, el secuestro de los hermanos Jorge y Juan Born, herederos de una parte sustancial de las acciones del holding Bunge y Born, el grupo económico internacional más grande del hemisferio sur.

Quieto quedó al mando de la operación y eligió como segundo a "Quique" Miranda, secretario militar de la columna Norte, quien se encargó de la construcción de una "cárcel del pueblo", de dos subsuelos, bajo una pinturería de fachada instalada en Martínez, en el norte del Gran Buenos Aires.

El secuestro debía concretarse un martes o un jueves, los días de menos tránsito, cuando los Born viajaban juntos desde la provincia hacia la sede de la empresa, en plena city porteña, después de dejar a sus hijos en el colegio.

Hubo un intento fallido un martes, pero dos días después, el 19 de setiembre de 1974, el comando montonero atravesó un cartel de ENTEL en la avenida Libertador - a la altura de Olivos - y desvió el tránsito por la calle San Lorenzo hacia la avenida Effling, paralela a Libertador, a una cuadra. Otro cartel, en el medio de la calzada, obligaba a los vehículos a reducir su marcha.

Cuando los dos Falcon celestes de Bunge y Born tomaron por avenida Effling, dos pick-ups - una Dodge azul y una Chevrolet color claro - embistieron frontalmente los autos, haciéndolos detener. Los guerrilleros rodearon los dos autos y encañonaron a sus ocupantes. En el asiento trasero del primer coche viajaban los Born.

Como el chofer - custodio, Juan Carlos Pérez, de 35 años, y Alberto Bosch, de 40, gerente de Molinos Río de la Plata, que ocupaban el asiento delantero, no respondieron con rapidez las órdenes de los montoneros, fueron ultimados a escopetazos. Jorge Born, entonces de 40 años, y su hermano Juan, de 39, fueron subidos a otros dos autos y llevados a la "cárcel del pueblo".

La acción del secuestro propiamente dicha demoró 38 segundos y participaron en forma directa 19 montoneros. Al cabo de media docena de años todos ellos estaban muertos, pero la Operación Mellizas, como la denominaron, resultó un impresionante éxito económico para la organización.

Montoneros pidió 100 millones de dólares de rescate y Jorge Born padre rechazó la demanda, ofreciendo 10 millones. La situación se complicó y las tratativas se prolongaron, hasta que la organización proporcionó evidencias de que Juan, el menor de los hermanos, estaba perdiendo la razón y caía en un autismo progresivo. Llegó un momento en que no reconocía a su hermano Jorge, que, por el contrario, nunca se quebró.

Finalmente, se acordó un rescate de 60 millones de dólares en efectivo - verdadero record mundial y entonces una cifra mucho más impresionante que ahora - y alrededor de 3,5 millones más en alimentos y otros bienes repartidos en barrios populares.

El 23 de marzo del '75 fue dejado en libertad Juan Born, tras el pago de 25 millones de dólares, quedando Jorge como rehén. El resto del rescate se completó en pagos escalonados y al menos en una ocasión se produjo un incidente en Ezeiza, cuando hombres de los servicios de inteligencia detuvieron a momentáneamente a cuatro empleados de Bunge y Born que traían casi cinco millones de dólares desde Zurich.

Las entregas las hacía un alto funcionario del holding, que se reunía a almorzar en distintos lugares del Gran Buenos Aires con "Ignacio" Torres – entonces jefe de finanzas de Montoneros - y le dejaba una valija con el dinero, que el montonero metía en el baúl de su Falcon, al que había forrado con una malla de alambre de cobre, para bloquear las eventuales emisiones de un mini transmisor que pudiera haber sido ocultado entre los billetes.

Aquí comenzó a jugar un papel importante David Graiver, una especie de precursor de cierta clase de hombres de negocios argentinos que armaron en muy poco tiempo grandes grupos de empresas que se derrumbaron más velozmente aún.

Su hermano menor, Isidoro, había sido secuestrado en agosto del '72 por las Fuerzas Armadas de Liberación (FAL) y la familia pagó 150 mil dólares para que fuera liberado.

Tres años después, David Graiver se convertiría en el banquero de los Montoneros. El empresario fue vinculado con la conducción guerrillera por intermedio de Enrique Juan Walker (a) "Jarito", periodista que había sido secretario de redacción de la revista Gente y había sido pareja de la psicóloga Lidia Papaleo, convertida, luego, en mujer de Graiver.

Roberto Quieto tomó a cargo de la vinculación, entre agosto del '74 y mayo del '75, se reunió varias veces con el banquero en una quinta de San Isidro alquilada por éste a una señora de patricios antecedentes. En uno de esos encuentros, el jefe montonero ofreció a Graiver entregarle como inversión 14 millones de dólares del total obtenido de Bunge y Born. El empresario aceptó de inmediato, contra ofertando una tasa del 9,5 % anual de interés.

A mediados de mayo de aquel año, Graiver logró zafar de un intento de secuestro y, asustado porque los guerrilleros le aseguraron que no habían sido ellos, decidió radicarse en los Estados Unidos, donde estaba intentando que le permitieran comprar un banco.

Antes de viajar, en ese mismo mes de mayo, mantuvo dos reuniones en las que lo acompañó Jorge Rubinstein, su hombre de confianza, con los representantes montoneros, para recibir los 14 millones una semana más tarde. Por los guerrilleros asistieron a esos cónclaves Quieto, "Ignacio" Torres y "Antonio" Salazar, coordinador internacional de la organización en Europa. El 25 de junio de 1975, un funcionario de Bunge y Born entregó en Ginebra, Suiza, a "Ignacio" Torres los 14 millones de dólares que faltaban para completar el rescate y Jorge Born fue dejado en libertad en la zona norte del Gran Buenos Aires.

Inmediatamente, en la misma ciudad, Torres y Salazar entregaron las valijas llenas de billetes a Jorge Rubinstein. Tras algunos inconvenientes técnicos y burocráticos - que solucionó Graiver -, los fondos fueron depositados en un banco y pasados a otros, para ser retirados, cargados en una avión alquilado y trasladados a Bruselas, donde ingresaron al BAS, pequeño banco belga adquirido por el empresario.

Posteriormente, el banquero recibiría de Montoneros dos 2.825.000 dólares más, provenientes de un total de 4 millones obtenidos por el secuestro de Heinrich Metz, directivo de Mercedes Benz Argentina.

De esta manera, el total entregado por Montoneros fue de 16.825.000 dólares, por los cuales Graiver se comprometió a pagar un interés mensual de 196.300 dólares.

El acuerdo se cumplió sin inconvenientes durante varios meses, mientras el acelerado deterioro de la situación política y socioeconómica, sumado a la creciente violencia de Montoneros y el ERP y la contrapartida represiva, desembocaron en el golpe militar de marzo de 1976.

Aparentemente en los meses previos habían comenzado a producirse diferencias en la cúpula de Montoneros y, en octubre del '75, Quieto había planteado que quería dejar la conducción. Pero no lo hizo y el 28 de diciembre de ese año, domingo, fue capturado y desaparecido cuando descansaba con su familia en una playa de Olivos.

La caída y el intento de Menem

Con las Fuerzas Armadas en el gobierno la represión se hizo masiva y el cerco fue cerrándose de manera inexorable. A mediados del 76 un grupo de tareas - aparentemente del Ejército - capturó a Ramón Neziba (a) "Moplo", quien fue reconocido por una montonera quebrada y había actuado como cobrador de los intereses que pagaba Graiver a Montoneros. No había llegado a conocer al banquero, pero recibía el dinero de Jorge Rubinstein cada mes. Se encontraban en una confitería e intercambiaban un portafolios vacío por otro con el dinero.

Algunas semanas mas tarde, el 17 de julio de aquel año, "Jarito" Walker fue atrapado en un cine del barrio de Caballito en la Capital Federal. Poco después "Antonio" Salazar, el coordinador de Montoneros en Europa, que había participado en Suiza en el traspaso de los 14 millones de dólares entregados, por Bunge y Born a Graiver, dejó un mensaje en clave, en una mensajería telefónica a la que el banquero llamaba regularmente desde Nueva York. Traducido, intentaba ser tranquilizador y significaba que Walker no había hablado.

Muy poco después, el 7 de agosto, cuando su grupo económico crujía por todas partes, el avión alquilado en el que Graiver viajaba desde Nueva York hacia el balneario de Acapulco en México, se estrelló en las montañas de ese país, muriendo el empresario y los dos pilotos.

A las pocas horas "Ignacio" Torres, jefe de finanzas de Montoneros habría llamado por teléfono a la viuda Lidia Papaleo, quien estaba en México - donde Graiver los había presentado dos meses antes -; para expresarle sus condolencias y manifestarle que, en su opinión, había sido un atentado, como siguen creyendo hasta hoy los dirigentes montoneros y Gasparini, quien en su libro atribuye a la CIA la muerte del banquero.

Dos meses y medio más tarde, el 22 de octubre, tras cumplirse minuciosamente un complejo recorrido por el centro de Buenos Aires, indicado por los montoneros para controlar que no era seguida, Lidia Papaleo almorzó en el restaurante del tercer piso de Harrods con dos jefes de la organización.

"Ignacio" Torres la presentó al "oficial superior" y miembro de la Conducción Nacional, Julio Roqué (a) "Lino" un cordobés que venía de las F AR izquierdistas y había disparado el F AL cuyos proyectiles asesinaron al general Juan Carlos Sánchez en Rosario, a mediados de abril de 1972. La mujer explicó que el grupo empresario armado por su esposo se estaba derrumbando y que no podía pagar los casi 200.000 dólares mensuales de interés. Comprensivos, los dos jefes montoneros acordaron concederle un período de gracia. En aquellos momentos, el dinero no era el problema principal para ellos.

En un momento en que "Ignacio" fue al baño, "Lino" Roqué y la viuda de Graiver acordaron una clave de emergencia para encontrarse. El jefe guerrillero llamaría "de parte del doctor Linares" y se encontrarían tres días y tres horas más tarde de la fecha que se dirían por teléfono.

En ese terrible año '76 aún habría una reunión más entre Lidia Papaleo y dos emisarios montoneros - uno era el "Doctor paz", quien sería en realidad Juan Gasparini -, en el departamento de su colaboradora Lidia Angarola, en Junín y Peña, durante la mañana de un domingo de diciembre.

Pocas semanas después, el domingo 9 de enero del '77, uno de los grupos de tareas encontró en el embarcadero de Tigre el hilo de las finanzas de Montoneros. Al día siguiente fue atrapado Juan Gasparini, en Callao y Santa Fe, y el sábado 15 cayeron "Ignacio" Torres y dos de sus asistentes.

El miércoles siguiente, utilizando el procedimiento de emergencias, acordado en el almuerzo de Harrods, "Lino" Roqué se encontró con Lidia Papaleo en el Parque Lezama y le aconsejó que tratara de irse del país, pues Torres y Gasparini conocían todos los detalles del acuerdo por los 16.825.000 dólares.

Acordaron mecanismos para establecer contacto en Madrid y en México DF, y se despidieron. No volverían a verse. El 29 de mayo, uno de los grupos de tareas llegó al domicilio donde estaba escondido Roqué y se produjo un largo tiroteo que finalizó cuando al montonero se le acabaron las municiones y se suicidó con una cápsula de cianuro.

Lo demás es historia mas o menos conocida, en la primer semana de marzo de ese año el entonces jefe de la Policía de Buenos Aires, coronel Ramón Camps, aparentemente autorizado por el comandante del primer cuerpo de Ejército, general Guillermo Suárez Mason, lanzó el operativo "amigo".

Los miembros de la familia Graiver y sus colaboradores cercanos fueron detenidos y permanecieron desaparecidos varias semanas, hasta que la situación fue "blanqueada" el 19 de abril por el presidente y comandante del ejército teniente general Jorge Rafael Videla, mediante una conferencia de prensa ofrecida en la sede de esa fuerza.

Nunca se tuvieron datos precisos de 10 ocurrido a Jorge Rubistein - que jugó un rol central en los tratos de Graiver con Montoneros-, ni siquiera Edgardo Sajón, Subdirector del diario "La Opinión" y secretario de prensa durante la presidencia del teniente general Alejandro Agustin Lanusse. Aunque todo indica que murieron mientras eran sometidos a "interrogatorios compulsivos."

Más adelante, un Consejo de Guerra Especial condenó a 15 años de prisión a Juan e Isidoro Graiver y a Lidia Papaleo - con penas menores para otros miembros del grupo -, quienes apelaron ante el Consejo Supremo de las fuerzas Armadas que redujo las condenas principales a 12 años de prisión.

Ante una nueva apelación, la Corte Suprema de Justicia - aún bajo el gobierno militar y en un notable acto de independencia- dejó sin efecto la sentencia de la justicia militar y dispuso que la causa pasara a la justicia civil.

El entonces fiscal Julio César Strassera, quien después lo seria de los ex comandantes en jefe, pidió 5 años de prisión para Isidoro Graiver y Lidia Papaleo, sobreseyendo al resto. Pero el juez falló anulando todo lo actuado por la justicia militar y dispuso la libertad de todos los miembros del grupo Graiver.

Después, en 1984, ya en el gobierno de Raúl Alfonsín, la familia Graiver se presentó en el fuero contencioso administrativo reclamando al Estado daños por cifras enormes y los bienes del grupo empresario que habían sido incautados.

Después de que ganaran el juicio en primera instancia, el presidente Alfonsín ordenó al procurador del Tesoro, Héctor Pedro Fassi, que negociara un acuerdo. Los Graiver reclamaban un total aproximado de 155 millones de dólares y un gran número de propiedades. Finalmente, el gobierno y el grupo transaron en 84 millones y unas cuarenta propiedades.

En marzo del '86, el Tesoro les pagó el 40 % de esa suma y desde mayo de ese año comenzaron a recibir pagos trimestrales. El 63 % de 10 que recuperaron correspondía a Isidoro y Juan Graiver y a su esposa Eva Citnach. El 37 % restante era del Lidia Papaleo y de su hija María Sol Graiver.

En su libro "El crimen de Graiver", Gasparini afirma que Juan e Isidoro Graiver -radicados entonces en España- hicieron un rápido viaje a Suiza en julio del '87 para depositar allí una parte importante de los fondos que habían recibido del Estado argentino.

Al mes siguiente, actuando como representantes autorizados de Montoneros, un pastor protestante homosexual con status de refugiado político en Noruega, acompañado por una redactora argentina de la revista pro-guerrillera Triunfar, editada en México, retiraron 400 mil dólares de un banco en Ginebra y los traspasaron a otra entidad. Sería el primero de una serie de pagos - los otros habrían sido mucho menores - de la familia Graiver a los montoneros que mostrarían que la "Operación Mellizas" seguía viva a mas de trece años del secuestro de los hermanos Born.

Mientras tanto, como parte de su teoría de los "dos demonios" - uno subversivo y el otro represivo - el presidente Raúl Alfonsín logró que Mario Firmenich fuera detenido en Brasil y extraditado a la argentina, donde la justicia lo condenó a una larga pena de prisión.

La cúpula sobreviviente de Montoneros, comenzó su aproximación durante la interna del justicialismo en 1988, después de ser rechazados por los renovadores de Cafiero, según explicó un miembro de la conducción nacional.

Como "Peronismo Revolucionario" hicieron campaña por el menemismo y propusieron repatriar fondos que tendrían en Cuba para un programa de reactivación económica basado en la construcción de viviendas populares.

Más adelante, ya presidente, Menem incluyó a los dirigentes montoneros en el indulto y Firmenich salió en libertad, algún tiempo después de que Roberto Perdía, Fernando Vaca Narvaja y Rodolfo Galimberti -este último ferozmente enemistado con el resto- regresaran al país.

El empresario Mario Rotundo, que fue amigo cercano de Menem durante la primer campaña electoral, participó al menos en tres reuniones en las que se trató el aludido programa económico y la manera de recuperar los fondos montoneros llevados a Cuba.

Uno de esos cónclaves fue el 17 de agosto de 1989, en un complejo turístico que Rotundo posee en Corrientes, por el Peronismo revolucionario asistieron Mario Montoto y Pablo Unamuno hijo. La reunión había sido rodeada de secreto, pero el jefe de Inteligencia de la Policía correntina la detectó y debió ser emplazado a mantener el asunto en reserva.

El segundo encuentro se habría producido, un mes más tarde, en el despacho presidencial de la casa Rosada y el jefe de gobierno habría manifestado que ya había hablado con el empresario Jorge Born quien se habría comprometido a no entorpecer con reclamos la autorización de los fondos eventualmente recuperados en un programa de desarrollo; según Rotundo, se hablaba entonces de 20 millones de dólares. Pero nada se concretó.

En 1989, ya con el presidente Menem en el gobierno, el entonces fiscal del juzgado Federal de San Martín, Juan Martín Romero Victorica, logró que el titular de ese juzgado, Carlos Lutz, embargará bienes de los Graiver por 46 millones de dólares, por considerarlos "verdaderos socios de una asociación subversiva".

Comenzó, entonces, una serie de pasos judiciales que convirtieron la cuestión en un complejo galimatías legal, donde lo importante fueron las transacciones económicas -básicamente entre los Graiver y los Born- y molestias prácticas, como allanamientos, para Mario Firmenich.

De aquellos años de dramática violencia, tras el indulto, aparentemente sólo queda como secuela legal - y ya prácticamente agotada - una serie de pleitos donde lo importante fueron pactos económicos. Una conclusión triste para una historia con miles de muertos e incontables vidas afectadas.

Fuente: http://members.fortunecity.com/foroverdad/finz-nuevprov.htm