viernes, 28 de agosto de 2009

LA IGLESIA Y LOS MEDIOS SEGÚN MONS AGUSTÍN RADRIZZANI


En la foto: El arzobispo Agustín Radrizzani

El arzobispo de Mercedes-Luján y presidente de la Comisión de Comunicación Social de la Conferencia Episcopal Argentina, Monseñor Agustín Radrizzani, recordó las palabras del Papa Benedicto XVI cuando dijo que "las nuevas tecnologías deben estar al servicio de todos y especialmente para los más débiles" y opinó que "el debate de la futura ley de radiodifusión debería darse en las cámaras después del 10 de diciembre, para garantizar la pluralidad de las ideas".

Monseñor Radrizzani concurrió a la comida mensual de ADEPA, acompañado por el director de prensa del Episcopado, padre Jorge Oesterheld, y fue presentado ante los editores de la prensa de todo el país, por el presidente de la entidad, Lauro Laiño.

Al referirse a los medios de comunicación y a las nuevas tecnologías, Monseñor dijo que "más que propietarios somos administradores. Se nos ha confinado unos dones que Dios ha destinado a la humanidad en su conjunto y que ha puesto en nuestras manos para que estén al servicio del bien común".

El arzobispo insistió en las palabras del Pontífice cuando dijo que "las nuevas tecnologías son un regalo de Dios" y reflexionó acerca de que "muchos hermanos nuestros no tienen lo necesario para vivir y están "afuera" en todo el sentido de la palabra, excluidos de una sociedad en la que "sobran" y muchas veces sin hogar y sin un lugar donde dormir y sin los alimentos necesarios". En ese sentido llamó para construir el bien común.

Cuando se le preguntó a Monseñor Radrizzani si se debe decir la verdad siempre, la respuesta fue que "debe haber un equilibrio, trabajar en equipo y evaluar entre todos". Y puso como ejemplo que "cuando la televisión muestra al conductor de un colectivo que le cortaron un dedo, está incentivando a los marginados y exaltados, a subir a los colectivos con una tenaza".

"A los editores no les debería interesar que la edición se agote, sino que llegue con el mejor mensaje", destacó el prelado, quien al referirse ante una pregunta sobre la ley de medios, dijo que "es necesario una nueva ley de radiodifusión que respete la libertad de expresión y ser lo más plural posible, porque hay un monopolio privado y no debería ser reemplazado por el Estado".

"Los medios de comunicación tienen un papel irreemplazable en la construcción de una Nación justa, en la que haya sitio para todos. Cada línea que se escribe, cada palabra que se dice, cada imagen que se genera, pueden contribuir, o no, a edificar entre toda esa sociedad justa a la que aspiramos".

Monseñor instó a los medios a "presentar las dificultades, en ocasiones dramáticas, con actitud constructiva e iluminadora, sin caer en la tentación del golpe de efecto fácil, muchas veces más rentable, ni en la búsqueda de ventajas personales ni de grupo".

"Están en juego cuestiones como el valor de la vida -señaló el arzobispo- la familia, el cuidado de los niños y la educación. Los medios de comunicación están en el centro de esta problemática y por eso los hombres y las mujeres que tienen responsabilidades en ello se encuentran ante un excepcional compromiso".

El prelado convocó a asumir la misión "como tantos grandes periodistas que dejaron huellas imborrables en la construcción de sus comunidades y la respuesta que podamos dar -dijo- pondrá de manifiesto la belleza y la importancia de la vocación del comunicador".